REDACCIÓN / GRUPO CANTÓN
José María Morelos.– Una mala temporada agrícola ha dejado a decenas de productores de sandía en el municipio de José María Morelos con pérdidas económicas significativas, tras el fracaso en la cosecha de la variedad 2,800, cultivada ampliamente en la región. La situación se ha replicado en otros puntos del estado de Quintana Roo, generando preocupación entre campesinos que ahora dudan en continuar con este cultivo.
Moisés Cardona Bautista, productor de la comunidad de La Carolina, relató que perdió los 120 mil pesos que invirtió en sembrar sandía en dos hectáreas de terreno. Según explicó, otros 30 campesinos de su zona enfrentan el mismo problema, provocado, al parecer, por la falta de insumos adecuados para esta variedad.
“Muchos prefirieron dejar perder todo”, lamentó Cardona. “Nosotros logramos salvar algo, pero muy poco: 13 toneladas por hectárea, en lugar de las 45 que se esperaban”.
La semilla utilizada, proveniente de China y traída por comerciantes yucatecos, ya había mostrado buen rendimiento en años anteriores. Sin embargo, esta temporada requirió fertilizantes y productos especiales que m0uchos agricultores no pudieron adquirir por sus altos costos.
El resultado fue desastroso: una sandía con cáscara gruesa y dura, parecida a una calabaza, y con una pulpa amarilla atravesada por vetas blancas. “Ese fruto no servía, y además se echaba a perder apenas maduraba”, explicó el productor, quien describió un proceso de cristalización en la pulpa que hacía inviable su comercialización.
“El problema fue generalizado; escuchamos lo mismo en otras comunidades y municipios. Fue una pérdida en toda la zona”, añadió.
Ahora, los productores de La Carolina se encuentran en la incertidumbre y analizan si volverán a sembrar sandía el próximo ciclo, temerosos de que las condiciones no mejoren y se repita el desastre económico.
