Redacción / Grupo Cantón
Polémico cierre en Squid Game 3: la muerte de Gi-hun y la victoria de un bebé provocan ola de reacciones y debates en redes sociales.
Cine.- El tan esperado desenlace de El juego del calamar 3 ha provocado un tsunami de reacciones entre fanáticos de todo el mundo. La tercera y última temporada de la serie coreana más vista de Netflix cerró con un giro inesperado: la muerte de Seong Gi-hun, el querido jugador 456, y la sorprendente victoria de una bebé.
El episodio final, estrenado el 27 de junio, dejó a millones sin aliento. Gi-hun, interpretado por Lee Jung-jae, se sacrifica en el último juego —llamado Sky Squid Game— para salvar a la hija de otra jugadora. En lugar de activar el mecanismo que aseguraría su propia victoria, el protagonista decide dejarse caer al vacío para que la recién nacida sobreviva.
“No somos caballos. Somos humanos. Los humanos son…”, fueron las últimas palabras de Gi-hun antes de su caída, en una escena que intencionalmente deja la frase inconclusa. Según explicó el actor, la línea fue cortada a propósito por el director Hwang Dong-hyuk para que el público complete el mensaje con su propia interpretación emocional.
Aunque muchos elogiaron el cierre por su carga simbólica, en redes sociales miles de usuarios expresaron su decepción, al considerar que la muerte del protagonista fue injusta y poco coherente con su evolución a lo largo de las tres temporadas.
Lee Jung-jae admitió en entrevista con The Wrap que él también se sorprendió por el destino final de su personaje. “Debatí mucho con el director sobre si era el mejor final para él”, confesó.
Sin embargo, respaldó la decisión creativa de Hwang, afirmando que su intención era ofrecer un mensaje de esperanza a través del sacrificio. “Pensé que contar esta historia a su manera era lo correcto”, dijo.
Por su parte, el director reveló que consideró un final alternativo más optimista, en el que Gi-hun sobrevivía, se reencontraba con su hija y presenciaba el funcionamiento del juego desde el exterior. Pero el contexto global —incluyendo la pandemia, las crisis climáticas y la desesperanza generacional— lo llevó a optar por un desenlace más reflexivo.
“Pensé que debía proteger al bebé porque necesitamos heredarles un futuro mejor”, declaró en entrevista con SPOTV.
