PALOMA WONG
GRUPO CANTÓN
CHETUMAL.- Unos tres mil docentes afiliados a la Coordinación Nacional de los Trabajadores de las Educación (CNTE) no regresarán a las aulas el próximo lunes 30 de agosto, al considerar que los planteles educativos no presentan las condiciones necesarias para que ellos brinden clases y pasar las cinco horas laborales.
Un grupo de docentes pertenecientes al CNTE se manifestaron afuera de la Secretaria de Educación en Quintana Roo (SEQ), debido a que el regreso a clases será obligatorio para los maestros y las autoridades educativas no están tomando en cuenta que no existen las condiciones sanitarias ni de infraestructura para el retorno a las aulas de clases de manera física.
“Vimos una cierta insistencia de la secretaria de educación de regresar en el sentido que dice que no todas están en las mismas condiciones, en las comunidades rurales ahí no pasó nada, no hay Covid, señalan las autoridades de la SEQ”, aseguró Aurora Moguel representante del CNTE en Q. Roo.
La entrevistada apuntó que también es docente de educación especial por lo que señaló que, si bien privilegian el derecho a la educación de los menores, dado que en la entidad se encuentra en un punto crítico derivado al alto índice que se tiene de contagios del coronavirus y la SEQ no tiene un plan de trabajo para ello.
“Al abrir las escuelas no se garantiza la vida de los niños como pretenden la SEQ el gobierno del estado, abrir las escuelas que como todos sabemos pudiera ser un foco rojo de contagios”, dijo.
Detalló que los datos que arrojaron las encuestas realizadas a nivel nacional a madres, padres y tutores del país, más del 60% de los padres de familia rechazaron el regreso a clases presenciales al considerar que la salud y la vida de sus hijos es primero y prefieren que se pierda el curso escolar.
La entrevistada resaltó que en unas 307 a 350 escuelas la propia Secretaria de Educación ha reconocido que no existen las condiciones necesarias para el regreso a clases presencial derivado del daño que tienen en su infraestructura ante el abandono que tuvieron y el vandalismo a la que fueron objeto y no están en condiciones para un regreso a clases.
Cabe recordar que el inicio a clases se llevará a cabo el próximo lunes 30 de agosto, donde el retorno será obligatorio para los docentes, pero no así para los estudiantes ya que la decisión la tomarán los padres de familia.
En su momento, Sergio Acosta Manzanero, presidente de la Asociación de Padres de Familia, dijo que las clases serán a distancia, ya que no hay condiciones sanitarias ni de infraestructura educativa para garantizar que no hayan contagios entre los estudiantes.
Reconoció que la infraestructura educativa está muy dañada, no cuentan con energía eléctrica y por lo menos un 60% carece de agua potable. Incluso dio a conocer que apenas 400 escuelas han sido atendidas (limpiadas) de las más de mil 500, dentro del programa de atención a escuelas.
Explicó que hoteles y restaurantes han decidió adoptar algunos planteles para lograr su recuperación mientras que empresas como Aguakan se ha comprometido a dotar de agua potable, así como personal de plomería.
Además, las escuelas particulares de la zona norte, a pesar que han sido dañadas en su economía, han donado herramientas y material de limpieza.
En cuanto a la carta de corresponsabilidad emitida por la Secretaría de Educación Pública dijo que hay mucha desinformación al respecto en cuanto a la corresponsabilidad y responsabilidad de mandar a los estudiantes a las clases.
Cabe mencionar que el propio gobernador del Estado, Carlos Joaquín González aseguró que, de acuerdo con el diagnóstico, 350 escuelas públicas no reúnen las condiciones en materia de infraestructura para el inicio de clases y el retorno presencial de maestros y estudiantes.
Reiteró que serán los maestros y padres de familia junto con la Secretaría de Educación estatal quienes evaluarán, en el transcurso de esta semana, si el retorno será gradual o no, o si inician clases este lunes.
Joaquín González señaló que las escuelas particulares han solicitado iniciar clases presenciales siempre y cuando cumplan con los protocolos sanitarios y su infraestructura así lo permita.