Redacción
CANCÚN, Q. Roo
El Colegio de Valuadores asegura que el entuerto legal en que se encuentra Malecón Tajamar ha provocado una caída en el valor de los terrenos de dicho complejo. La incertidumbre derivada de la suspensión de cualquier tipo de obra así como el desconocimiento del tiempo que pudiera extenderse el juicio hace que por el momento los terrenos estén lejos del valor por el que fueron adquiridos.
Arturo Machuca, presidente del Colegio de Valuadores, dijo que aunque no han entrado a hacer valuaciones de los predios en Malecón, es evidente que los juicios en contra de cualquier obra que implique construir sobre el manglar aún existente en el sitio hacen muy difícil que los terrenos tengan un valor de uso.
“Hay una afectación en el costo de los terrenos; de cuánto, no lo sé, pero lo que es un hecho es que hoy tiene un valor menor que cuando fueron adquiridos por los actuales propietarios”, dijo.
Agregó que Malecón Tajamar es un proyecto que cumplió con todas las exigencias de ley, desde su inicio hace ya más de diez años, lo mismo que en su etapa de urbanización hasta la fase de comercialización de los lotes, los cuales en su mayoría, aseguró, tienen uso comercial, lo cual hace que su valor al momento de la compre-venta fuera superior a un terreno de uso habitacional.
Lamentó que los juicios interpuestos en contra de la obra hayan descarrilado inversiones “generadoras de economía”, pues las millonarias obras que se proyectaban en el complejo implicaban la generación de nuevos empleos, así como la instalación de nuevas empresas que también implicaban la generación de empleos indirectos así como movimientos económicos que por el momento están suspendidos de manera indefinida.
“En función de cómo fueron comprados los terrenos, hoy definitivamente valen menos, pero es un problema que se tiene que solucionar para el bien de la sociedad. Es una inversión que hizo el gobierno federal; es un buen desarrollo, un buen producto en el que se cuidó incluso el aspecto ecológico”, dijo.
El experto valuador explicó que el costo de la tierra atraviesa por varias etapas, que van desde que se encuentran en breña, sin ningún tipo de servicio, hasta su lotificación, urbanización y posterior desarrollo, así como la etapa de comercialización que puede ocurrir desde cualquiera de las etapas anteriores, es decir, venderse desde antes de que se urbanice o desarrolle la tierra.
En el caso de Malecón Tajamar, dijo, el problema surgió en la etapa posterior a la urbanización, justo antes del inicio del desarrollo de la tierra, lo cual daba ya un valor comercial a los terrenos que pudo incluso ser mucho mayor si se hubiera permitido el desarrollo de los proyectos que estaban ya planeados para el sitio.
Posibilidad de recuperación
El dirigente de los valuadores en Cancún dijo sin embargo, que en función del resultado de los juicios, el valor de los terrenos podría recuperarse. Es decir, en caso de que el resultado del litigo deje abierta la posibilidad al desarrollo de proyectos inmobiliarios, se podría revertir la pérdida de valor que está afectando al Malecón Tajamar.
Sin embargo, se trata de un arma de dos filos, pues en caso de que el litigio derive en una prohibición definitiva a todo tipo de obras en el complejo, las consecuencias serían desastrosas.
Riesgos latentes
Los riesgos han sido ampliamente difundidos por el propio Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), en caso de que Malecón Tajamar sea cancelado definitivamente como consecuencia de los juicios de amparo en contra de toda obra que atente contra la flora y la fauna que habitan al interior del complejo.
Según Fonatur, 5,000 empleos e inversiones por más de 11 mil millones de pesos es lo que está en juego en Malecón Tajamar en caso de que el proyecto se cancele en definitiva.
De la comercialización de lotes, el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) obtuvo 2,040 millones de pesos que habrán de implicar una derrama de 11,563 millones de pesos y la creación de 5,166 empleados directos así como 10,332 empleos indirectos.
En total, el Malecón Tajamar tiene una capacidad máxima de 2,583 unidades de alojamiento, conforme al Programa de Desarrollo Urbano de Cancún vigente en 2005, en virtud del cual se otorgaron las autorizaciones ambientales de la época, según asegura el propio Fonatur en la presentación de Tajamar hecha en febrero de este mismo año.
El Fondo asegura que entre los beneficios indirectos de Malecón Tajamar se encuentra el incremento y diversificación de la oferta inmobiliaria; la entrada de divisas por la llegada de inversionistas extranjeros; incremento en la afluencia de turistas nacionales y extranjeros, mayor consumo de servicios turísticos en la zona de influencia.
