Jazmín Ramos
CANCÚN, Q. Roo

Se le conoce como “el voto del hambre” puede ser a granel (despensas) o en monedero electrónico (tarjetas de prepago), pero tiene el mismo fin… la coacción del sufragio, es una práctica muy común en los procesos electorales y anteriormente era exclusiva del Partido Revolucionario Institucional (PRI), pero ahora todos los colectivos políticos le entran al ruedo.

Este delito es el más popular, pero hay un promedio de diez infracciones comiciales de los cuales echan manos los partidos políticos durante los procesos electorales para abonar al triunfo y en donde Quintana Roo no podía estar exento, es más, es la entidad que ocupa el segundo lugar en irregularidades por el quebranto a la ley electoral.
Según datos de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) en lo que va del año se tiene el registro de más de cien denuncias destacando el reparto de despensas y el turismo electoral.

Pero a ello, durante este proceso electoral (considerado los más reñidos en el estado), se ha sumado la guerra sucia, en donde las coaliciones con más posibilidades de triunfo utilizan las redes sociales para difundir videos, textos, fotografías, gif, así como toda clase de contenidos para denostar al contrincante.

Asimismo, la violencia se ha manifestado, con la quema de propaganda, vehículos y viviendas e incluso despidos de burócratas por hacer público su intención de votar por la oposición, además han reportado casos en los que se exige al personal realizar activismo político por un determinado candidato.

Esta situación ha provocado que Quintana Roo se considere un foco rojo entre los estados donde hay elecciones e incluso analistas a nivel nacional vaticinan la impugnación del proceso.

Al respecto el sociólogo Martín Navarrete Gómez, refirió que lo reñido del proceso electoral ha propiciado echar mano de toda clase de “mañas comiciales”, pero la práctica del “voto del hambre” es el que se ha intensificado en la recta final de las campañas, de hecho el cambalache del voto por satisfacer las carencias de alimento han sido tal que hasta reparten carne, tortillas y los más pudientes monederos electrónicos.

Mencionó que, si bien estas prácticas era exclusivas del PRI ahora se han extendido a todos los colectivos políticos, tan es así que hay quejas contra el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), quien hizo una versión mejorada de entrega de basicos, en las que tambíen incluye una tarjeda de prepago llamada Platinum.

Pero esto, no es todo hay colectivos que inclus ofrencen bolsa de trabajo y realizan gestiones sociales, además regalan terrenos, sobre todo a los líderes sociales.

“En sí, en aras de la coacción del voto, los partidos políticos han diversificado sus mañas comiciales, pues de esta forma evaden a la Fepade, ya que la mayoría de los irregularidades que comenten no están tipificadas como delito electoral”.

Asimismo, el representante en México del Centro Latinoamericano de Estudios de Opinión (CLEO), Carlos Gordoa Palma, dijo que aun cuando el proceso electoral en si es un reto para quienes buscan puestos de elección popular, estos son los comicios más reñidos en las historia de Quintana Roo, por lo tanto se ha desatado toda clase de estrategias para conquistar el voto y obviamente la compra del sufragio sigue siendo la más útil.

Refirió que, la entrega de productos básicos, gorras, camisetas, tarjetas propagadas y el reparto de dinero en efectivo, son acciones de coacción del voto, las cuales se aplican en las colonias populares y zonas vulnerables, dado que ese segmento emite su sufragio basado en promesas y la satisfacción inmediata de una necesidad.

“Ese es el sufragio más fácil de conseguir y por ende ese sector social es el que más vota, mientras que en la clase media y media baja, que ha sido la más golpeada por las Reformas Federales, tiene un alto abstencionismo, por lo tanto sí sale a votar lo hará buscando culpables y emitirá un decisión como un instrumento de castigo, mientras que la clase alta define su intención del voto cuidado sus intereses”.

En ese sentido, dijo que por ello, las coalición oficial –PRI-PVEM-PANAL- le apuesta su voto duro y busca denostar a su contrincante en las redes sociales para inhibir el voto, mientras que la alianza PRD-PAN ha lanzado toda una campaña para evitar el abstencionismo, pues es ahí donde se concentran sus posibilidades reales de triunfo.

Mencionó que, sin duda alguna la campaña negra se intensificará en la recta final del proceso, así como las acciones para la coacción del voto, aquí lo importante será la actuación de las autoridades electorales y de la Fepade.

Reparten despensa a cambio de credenciales de elector

Habitante de colonias populares del municipio de Benito Juárez, denunciaron a Quintana Roo Hoy, que un grupo de personas que se identifican como empleados de gobierno, iniciaron el reparto de despensas a cambio de la credencial de elector.

Los brigadistas, quienes no traen ningún logotipo partidista, portan una gorra y camisa blanca, cuando llegan a los domicilios les indican que le dejaran productos básicos, pero que tiene que entregar la mica.

Los quejosos entre ello, Miguel Hernández Tzab, indicaron que estas personas son muy insistentes, al solicitar la credencial de elector, pues según ello es para tramitar ayuda social y que prueba de ello es que dejarán la primera despensa.

“Llegaron a mi casa aquí a en la Región 99 dos personas y me preguntaron que si no estaba interesada en una despensa, la cual me llegaría cada mes, yo le dije que sí y me pidieron mi credencial, yo pensé que querían una copia, pero querían la original y ahí fue donde ya no me gusto”, indicó la ciudadana Francisca Martínez Ramírez.

Por su parte, Cecilia Curiel Velázquez, vecina de la región 227, dijo que ella sí recibió la despensa porque tenía dos credenciales de elector, “pensé que la había perdido y trámite otra, entonces se me juntaron las dos y cuando me la pidieron di la vieja y me dejaron la despensa.

Asimismo, Rogelio Pedroza Bahena, de la región 510 dijo que hace una semana llegaron a su domicilio tres personas con playeras blancas y gorra, quienes indicaron que venía del gobierno y que estaban empadronado para dar ayuda social, que para ello necesitaban tomar mis datos y les preste mi credencia, luego uno dijo que iba a sacarle copias y el otro se quedó entregándome una despensa, cuando entre a mi casa para dejar los productos, se fue y no me regresaron la mica.

Por su parte, Alejandro Pastrana Cabañas, de la región 233 mencionó que recibió la visita de dos personas, quienes indicaron que era del gobierno federal y que estaban entregando despensas, “fue entonces que me dijeron que querían mi credencial, pero yo les dije que no tenía y se fueron”.