Jazmín Ramos
CANCÚN, Q. Roo
Accidentes viales y caídas de peatones, provocados por rejillas y alcantarillas abiertas, son muy comunes en Benito Juárez, sin que las autoridades hagan caso a las denuncias por esas irregularidades en la cinta asfáltica.
Tras un sondeo en varios puntos de la ciudad, los entrevistados indicaron que no hay calle en Cancún que no se salve de tener uno o dos pozos sin rejillas, lo cual es un verdadero riesgo, pues tanto los operadores como la población pueden sufrir un percance.
“En la avenida Nichupté hay por lo menos cinco rejillas abiertas, situación que pone en peligro a los automovilistas, prueba de ello fue el accidente de un camión de Autocar que por esquivar una se estampó en el camellón”, indicó el ciudadano Jacinto Hernández Sotelo.
Por otra parte, Karina Herrera Altamira dijo que la semana pasada su vecino cayó en una alcantarilla ubicada en la avenida Politécnico, la cual se encontraba sin tapa.
“Él no ve bien en la noche y como para variar tampoco hay alumbrado, no previno y sufrió un accidente”, agregó.
El automovilista Ángel López Galindo mencionó que la semana pasada cayó a un pozo de absorción que no tenía tapa, por lo que se dañó el ring de una llanta.
