CANCÚN, Q. ROO.- El 100% del capital que se está invirtiendo en Ynfinity es mexicano. La apuesta del grupo Norcaribe por Cancún arranca desde marzo de este año, por el auge que tiene Cancún en materia inmobiliaria desde 2015 a la fecha y por el potencial que tiene Malecón Tajamar como el nuevo centro comercial, financiero y residencial de la ciudad, explicó en entrevista Isis Gallegos, directora del grupo.
La directiva dijo que los inversionistas que conforman Norcaribe provienen de Monterrey, Ciudad de México y Guadalajara, los cuales están haciendo una apuesta por Cancún como una de las ciudades que está llamada a ser la cuarta metrópoli más grande del país en un plazo de no más de 15 años.
En ese contexto, dijo, Malecón Tajamar se está convirtiendo en el punto donde convergen los principales desarrollos comerciales, residenciales y de negocios que harán crecer la ciudad en los próximos 15 años, además de ser la conexión de la zona centro con la zona hotelera de Cancún.
De ahí que el potencial de este complejo sea muy elevado, además de que su construcción y consolidación es necesaria para que la ciudad pase a ser un destino de sol y playa a convertirse en un centro financiero y de negocios que diversifique la economía, hoy tan dependiente del turismo.
Bajo esa perspectiva, dijo que Ynfinity ataca dos de los principales nichos de mercado que están destacando en Cancún: el turismo de negocios, así como el mercado de las viviendas vacacionales.
El primer nicho de mercado se atenderá con el hotel business class de 281 habitaciones, el cual probablemente sea operado por la cadena Hilton o en su defecto Hyatt.
Explicó que en los últimos años la oferta de hoteles de negocios ha crecido en el centro de Cancún por la gran necesidad de atender un turista distinto del que sólo busca ocio y diversión. Es decir, la ciudad está migrando a una economía de servicios financieros o complementarios al turismo que demanda otro tipo de servicios de alojamiento, como los que ofrecerá Ynfinity.
El otro nicho es el de las viviendas vacacionales, que es el centro en torno al cual se creó el concepto Ynfinity. La directiva recordó que las viviendas vacacionales están en pleno auge, con más de 1,500 unidades en pre-venta y construcción en Cancún, luego de varios años en que se dejó de construir por la crisis inmobiliaria que afectó no sólo a México, sino que tuvo repercusiones mundiales.
Explicó que Cancún y otras ciudades del país viven un momento excepcional para la consolidación del mercado de viviendas vacacionales, que si no se aprovecha ahora podría ser muy costoso en términos de oportunidades de inversión, generación de empleos y diversificación económica.
De ahí que aseguró que es trascedental que Malecón Tajamar se reactive, guardando todas las condicionales ambientales del caso, pero asegurando la inversión de quienes ya adquirieron terrenos con la esperanza de generar nuevos negocios que aporten al crecimiento de la ciudad.
Añadió por último que la primera torre condominal de Ynfinity, aún en obra, tiene ya 40% de sus departamentos vendidos, pero para diciembre de este mismo año habrán colocado 60%.
La construcción arrancó el 14 de marzo pasado, abriendo oportunidades de empleo directo a 300 personas. De acuerdo con el Plan Maestro, la apertura del centro comercial se contempla para junio de 2017, la primera torre residencial estaría finalizada para agosto de ese mismo año, la segunda de las torres abriría en agosto de 2018 y el centro de alojamiento, en agosto de 2019, explicó.
Proyecto Ynfinity no está en zona de litigio
Katerine Ender Córdova, representante de la asociación Salvemos Manglar Tajamar, aseguró que existe tranquilidad respecto al anuncio de construcción de 3 torres y un hotel en los terrenos del Malecón Cancún que anunció la empresa Ynfinity, ya que éstos no se encuentran dentro de los predios en litigio.
“Ese edificio de Ynfinity fue recientemente activado, de hecho colocaron unos tambos y quitaron la pluma para poder arreglar el acceso. Se trata de una cuadra completa donde ya existen dos edificios: Ynfinity y Azuna. Los ingenieros informaron que van a construir otro, pero todo, dentro de la misma zona colindante con el Malecón”, explicó la entrevistada.
Se trata de una cuadra completa que se encuentra de lado de la rambla, pegado a lo que se conoce como el Table, justo donde estaba colocada la pluma.
Hace unos días, al quitar la misma, los representantes legales del proyecto informaron a la ambientalista que la intención es de permitir el acceso de la gente que va a ver los departamentos en venta y se comprometieron a que no permitirán el acceso de nadie más.
“Nos aseguraron que lo que menos quieren es tener problemas con la gente, al quitar la pluma y poner unos tambos, es para que la gente que va a conocer los departamentos entren caminando y evitar que entren los carros al malecón, al menos en lo que culmina el conflicto”, explico Ender Córdova.
Afirma que aparentemente, debido a las cuestiones legales en los que está inmerso el Malecón y todo lo relacionado a Tajamar, a los inversionistas les ha costado trabajo poder comercializar los departamentos, debido a que se encuentran a un costado.
Como se informó para los próximos cuatro años entre Puerto Cancún y Malecón Tajamar se estarán vendiendo mil 500 departamentos en un proyecto inmobiliario de tres torres y un hotel en los terrenos del Malecón Tajamar. (Rocío Villalobos /QUINTANA ROO HOY)
