Actualmente, en el ámbito urbano, las ciudades se están enfrentando día con día a nuevas oportunidades, nuevas opciones, nuevos retos que de acuerdo con la habilidad de los arquitectos que las intervengan podrán posicionarse en algún lugar económico, político o social ante otras.
De acuerdo con Metropolis Magazine, los mayores retos en una ciudad siempre estarán enfocados mayormente a la sustentabilidad, transporte y vivienda, conceptos en los que coincido totalmente.
Dicha revista menciona que las diez ciudades más habitables del mundo en orden de aparición son las siguientes: Copenhague, Berlin, Helsinki, Singapur, Viena, Tokio, Osio, Melbourne, Toronto, Portland.
Y bien, me pregunto ¿qué es lo que tienen en común dichas ciudades para ser consideradas como las más habitables del mundo?
Después de realizar un minucioso análisis de las características que presentan dichas ciudades, es que en realidad existe total congruencia y armonía en su diseño, principalmente en factores de transportación y cultura, son ciudades que poseen una planeación urbana que ha permitido un correcto y oportuno desarrollo en beneficio de la comunidad.
A menudo se puede confundir el término desarrollo con crecimiento urbano, la enorme diferencia se encuentra en el concepto de planeación.
Estas ciudades se preocupan no solo por cumplir con estándares de sustentabilidad, sino además impulsan proyectos socialmente responsables con el medio ambiente, además de que la misma sociedad está debidamente educada para aportar lo mejor de sí en beneficio de su segunda casa, la ciudad.
Creo que son conceptos que podemos tomar para guiarnos y darnos cuenta que son proyectos posibles, ideas que se pueden implementar y rescatar lo actual.
Muchas veces tendemos a responsabilizar a la persona que tenemos más cerca para culpar fallas propias en nuestro actuar, el gobierno siempre resulta el responsable de malas acciones o problemas urbanos, sin embargo, la urbe está conformada por nosotros como ciudadanos, no sólo por autoridades locales, y si en conjunto trabajáramos para implementar proyectos urbano-sustentables, estoy convencido que estaríamos escribiendo una historia totalmente en el libro de Quintana Roo, pero sobre todo, en la de México.
