ALEJANDRA GALICIA
GRUPO CANTÓN
CANCÚN.-. En los últimos cinco meses de este año el Centro de Justicia para la Mujer (CJM) ha emitido mil 112 medidas de protección para mujeres que viven violencia y sólo tres de las 10 medidas de protección disponibles son las más solicitadas por las víctimas.
Las medidas de protección están contempladas en el Código Nacional de Procedimientos Penales y son levantadas por las autoridades del Ministerio Público para proteger a las mujeres que viven algún tipo de violencia, cuando el agresor representa un riesgo de seguridad para la víctima.
Quintana Roo es la tercera entidad de México que más medidas de protección emite para las víctimas de violencia, así lo confirman los datos del Banco Estatal de Datos e Información sobre casos de Violencia contra las Mujeres (Baesvim).
Las más solicitadas
La directora del CJM en Cancún, Mariana Sáncheza, dijo que las medidas número 4, 5 y 8 son las que más emiten las autoridades para las mujeres, y son usadas de acuerdo con la ley para actividades específicas.
En el caso de la número cuatro, sirve para que la víctima obtenga la entrega inmediata de sus pertenencias personales y de identificación, la número cinco ordena al agresor que tiene prohibido realizar actos de intimidación en contra de la víctima y la número ocho es para que la víctima tenga auxilio inmediato de la policía al domicilio.
Evaluación del nivel de riesgo
La funcionaria explicó que la autoridad tiene un modelo para detectar el nivel de riesgo en el que se encuentran las mujeres que manifiestan violencia a través de una denuncia.
Para conseguir esa información, la víctima es entrevistada a través de un diagnóstico de 20 preguntas que realizan trabajadores sociales o psicólogos de la dependencia, este personal recolecta los datos sobre el agresor, la víctima y el número de agresiones que ha recibido.
Con los resultados se determina si la mujer se encuentra en un nivel bajo, medio o alto de riesgo; en caso de que sea alto, notifican al Ministerio Público para emitir una medida de protección, incluso sin que la víctima denuncie directamente al agresor.
En caso de que la mujer decida no denunciar, pero el nivel de riesgo es alto, se manda una visita con la policía de investigación para verificar si la valoración de riesgo que hicieron es correcta.