QUINTANA ROO.-“No venimos a ser virreyes ni vicegobernadores; seremos servidores públicos, la palabra funcionario queda eliminada de nuestro vocabulario”, dijo en entrevista el coordinador para Quintana Roo del próximo gobierno federal, Arturo Emiliano Abreu Marín, quien añadió que entre sus principales funciones una vez que asuma el cargo, está la de adelgazar la actual estructura de gobierno federal en el estado, la cual es obesa y onerosa.
También dijo que la instrucción del presidente electo Andrés Manuel López Obrador es la de que se figura no compita con el poder ejecutivo estatal. “No venimos a quitarle reflectores al gobernador en turno (Carlos Joaquín González), sino trabajar de manera coordinada para atender las prioridades del estado: inseguridad y combate a la corrupción.
“Porque él (el gobernador) es el jefe de la casa; nosotros sólo venimos a tratar de apoyar a los programas estatales de manera paralela al impulso que se les dará a los programa de desarrollo social”, añadió.
Ambas partes estamos en el entendido de que se debe trabajar sin distingo de colores o filias partidistas, tanto para el buen funcionamiento de los programas sociales como para la relación de trabajo que iniciará en diciembre próximo, explicó.
Eliminación de delegaciones
La primera acción de gobierno será la de iniciar con la eliminación de las 65 delegaciones federales que actualmente están establecidas en Quintana Roo; sólo permanecerán las que sean absolutamente indispensables, pues hay algunas que tienen grandes instalaciones pero apenas ocupan 10 ó 15% de los inmuebles que rentan, explicó el también economista.
Se eliminarán todos los puestos de confianza de las dependencias federales, pero no se tocarán los puestos sindicalizados, ni las plazas federales de base.
La “cancelación” de las delegaciones federales implicará un ahorro de recursos, pues se dejará de invertir en rentas y pago de sueldos a personal, además de que las oficinas se procurará que estén concentradas en pocos edificios.
“Una de las crítica que nos han hecho es la de que quién va a firmar los pasaportes, como si esa fuera la función más importante de un coordinador, autorizar los viajes o viáticos de los funcionarios”, dijo.
“Lejos de concentrar muchas facultades en un sólo cargo, me abocaré principalmente a hacer más eficientes los programas federales que ya existen, eliminar aquellos que no funcionen y crear nuevos”, añadió.
A partir de la primera o segunda semana de diciembre se enviará la iniciativa que crea las coordinaciones de programas de desarrollo integral, que es como hasta ahorita se denomina la figura que oficialmente ocuparán los coordinadores estatales del próximo gobierno federal.
Coordinaciones regionales
Además del coordinador estatal, se crearán 5 coordinadores regionales en el estado, los cuales deberán quedar designados antes del 9 de agosto. Las personas que ocupen estas coordinaciones regionales serán propuestas por Abreu Marín mediante una terna, pero la designación final será decidida a nivel central por el gobierno del presidente electo Andrés Manuel López Obrador.
Las coordinaciones regionales se instalarán en Chetumal, Cozumel, Benito Juárez (Cancún), Solidaridad (Playa del Carmen), así como una más en la zona maya, la cual abarcará los municipios de Felipe Carrillo Puerto y José María Morelos, en el centro del estado.
Esta última tendrá la particularidad de que el coordinador será elegido por las comunidades mayas de ambos municipios para garantizar la representatividad de este sector de la población estatal.
Las coordinaciones regionales tendrán funciones ejecutivas, en la aplicación de los programas federales, pero también tendrán funciones de comunicación y difusión de las obras y programas de gobierno. “No será propaganda de Morena, sino difusión de las acciones del gobierno federal; tendrán facultades políticas pero también ejecutivas, dependiendo del caso”, dijo.
Al mismo tiempo realizarán estudios sobre la efectividad de los programas, censo de los beneficiarios y comprobación de que las becas y apoyos económicos estén llegando a quienes verdaderamente lo necesiten, explicó el también economista.
Combate a la inseguridad
Abreu Marín aseguró que en la primera reunión que sostuvo con el gobernador Carlos Joaquín, abordaron los temas más urgentes que enfrenta el estado, uno de ellas, la inseguridad.
Sin que se pueda hablar de acuerdos hasta el momento, porque oficialmente no ha asumido el cargo, dijo que se mantendrá el Ejército en el estado, pero de manera paulatina se irá reduciendo el número de efectivos conforme los niveles de violencia se vayan conteniendo.
Además procurarán tener un acuerdo con los medios de comunicación para “sugerir” que no se magnifiquen los problemas, sino darles su justa dimensión. “Porque el día que empeore la inseguridad en Quintana Roo, hasta yo tendría que irme”, dijo. (Jesús Vázquez/GRUPO CANTÓN)