Mari Priego
Grupo Cantón
Cancún.- Poco más de ocho años han pasado desde que la tienda del ISSSTE en Cancún cerró sus puertas, y desde entonces este edificio se ha convertido en un gran lote baldío, que es usado por indigentes y por ciudadanos para tirar desperdicios de comida y animales muertos, lo que genera molestias en los vecinos de la zona, quienes piden a las autoridades que este predio sea reutilizado.
En un recorrido por este edificio, ubicado en la esquina de las avenidas Kabah y Miguel Hidalgo, mejor conocida como Ruta 5, se pudo apreciar que este sitio, conocido hace 15 años por ser uno de los supermercados más populares de la ciudad, luce ahora con las paredes llenas de grafitis, basura y desechos de todo tipo.
Vecinos de la zona aseguran que por las noches no es seguro pasar cerca de este edificio, ya que se han registrado robos e intentos de abuso a mujeres.
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