El que te promete igualdad, pero jamás te abriría la puerta de su casa porque está en un círculo al que tú no pertenecerás nunca;
para él solamente eres el engranaje, el medio, el que no merece ni tiene derechos, garantías ni privilegios porque no te corresponden, “no eres de los suyos”, esos que viajan en yate, se transportan en helicóptero y juran que su fortuna es producto del arduo esfuerzo familiar,
nunca de robos, préstamos con firmas en el “hielo” que, derretidas, nunca se sabrá cuáles fueron los acreedores ni las condiciones del adeudo, pero igual te usarán como Milei usó a los inconformes para acabar con la “casta”,
cuando la casta eran ellos, los desprotegidos que lo encumbraron; como Trump usó a los migrantes que lo hicieron ganar, para después, de una patada, quitarles derechos y ciudadanía y envolverlos en el terror de ser deportados de la tierra que ayudaron a construir.
Así un millonario mexicano venido a menos dio su propio grito en una televisora, cuya concesión está a punto de perder por endeudamiento y malos manejos , pero que, creyendo que “ni vemos ni sabemos”, pretende lanzar su partido y su “movimiento” contando con el arribismo de los que ya se tomaron la foto con él, así, “derechitos”
para que les lluevan bendiciones económicas del “nuevo líder” como antes les llovieron de los otros, esos mexicanos apátridas que estuvieron en la presidencia sintiéndose todopoderosos,
modernos “Midas” que convertían todo en oro para aquellos que se tiraban al piso para que el elegido de los dioses pasara, “no importa que me pise, don preciso, no importa que me humille, mientras salpique tantito de ese poder que da la presidencia”,
al fin y al cabo, el cuerno de la abundancia que sigue siendo México ya regresó y ese “México para los mexicanos” que el Obradorismo trajo hará que puedan vender una y otra vez al país y su gente sin que se den cuenta.
El grito dado desde el Ajusco solo es para que no se le cobre lo que debe, y si acaso la Corte le pone el pie en el cuello, poder decir a los gringos “
¿Ya vio como sí hay represión, papá Trump?
¡Dele duro a los terroristas que me quieren cobrar como a usted lo quisieron poner en la cárcel, suficiente motivo para invadir (literalmente porque virtual, desde hace mucho nos invadieron) esa tierra de narcos! y quizá pueda ser nombrado por Trump como “Ricardo I, El Gritón”.
