En esta ocasión pido se me permita compartir un extracto de un libro extraordinario que estoy leyendo, del autor Jiddu Krishnamurti, titulado “La verdad es una tierra sin caminos” y me ha puesto a reflexionar profundamente en varios temas y hoy comparto contigo, quien me lee…La verdad es una tierra sin caminos no es posible acercarse a ella por ningún sendero, por ninguna religión, por ninguna secta, la verdad al ser ilimitada, incondicionada, inabordable por ningún sendero, no puede ser organizada, ni puede formarse organización alguna, para conducir o forzar a la gente a lo largo de algún sendero en particular. Una creencia es un asunto puramente individual y no pueden ni deben organizarla, si lo hacen, se torna en algo cristalizado, muerto; se convierte en un credo, una secta, una religión que ha de imponerse a los demás. Eso es lo que todo mundo trata de hacer. La verdad se empequeñece y se transforma en un juguete para los débiles, para los que están solamente momentáneamente descontentos; la verdad no puede rebajarse, es más bien, el individuo, el que debe hacer el esfuerzo de elevarse a ella. No me concierne a mí mismo, con fundar religiones, nuevas sectas, ni establecer nuevas teorías y nuevas filosofías, me concierne con una sola cosa esencial. La verdadera libertad del hombre, ayudarle a que rompa con todas sus limitaciones, liberarse de todos los miedos, del miedo de la religión, del miedo de la salvación, del miedo de la espiritualidad, del miedo del amor, del miedo de la muerte, del miedo de la vida misma, mi deseo es que el hombre sea incondicionalmente y absolutamente libre, sostengo que la única verdadera espiritualidad, es la incorruptibilidad del propio ser, que es eterno, que es la armonía entre la razón y el amor. Esta es la absoluta realidad que es la vida misma; la verdadera perfección, la armonía del ser, no tiene ley, esto no debe ser traducido en un sentido caótico, está por encima de toda ley y de todo caos, porque es la semilla de todo, desde la cual surge toda transformación y en el que todas las cosas dependen, si desean la armonía del ser, en la que es la verdad, y ese equilibrio del ser que es verdadera creación, debe cuidar de ese ser, que permanece en cada uno y se preocupen solo con ese ser, en la creación de ese equilibrio eterno, se encuentra el despliegue de la verdad…
