Las puñaladas están al orden del día en el Partido Revolucionario Institucional, donde los antiguos aliados se han vuelto enemigos.
Resulta que al ver como las investigaciones por desvíos de recursos y otros delitos se acercan cada vez más a ellos muchos priístas han optado por el fuego amigo, como el que han enviado al actual presidente de su partido, Enrique Ochoa Reza.
En días pasados se dio a conocer que la mayoría de los casi 200 diputados federales priistas pidieron a su coordinador, Carlos Iriarte, que le exigiera al presidente Enrique Peña Nieto que “quitara ya” al dirigente nacional del CEN del tricolor.
Pero de inmediato fue desmentida esa versión, saliendo a la luz que fueron personajes como Ivonne Ortega y Félix González Canto, aliados del ex presidente priísta Manlio Fabio Beltrones quienes difundieron esa versión.
Lo cierto es que al ver como se les escapa de las manos el poder el grupo político de Félix González Canto, que no tiene ninguna posibilidad para 2018, ha optado por atacar mediante diferentes estrategias.
En el caso de Ochoa Reza, se sabe que les ha negado espacios por su histórica derrota en 2016, cuando el tricolor perdió varias elecciones.
En lo que respecta a Quintana Roo, se han especializado en difundir fake news o noticias falsas, para lo cual se han aliado con especialistas en guerra sucia. Su principal tarea es empañar la labor del gobernador del estado, Carlos Joaquín.
Para ello, el ex gobernador ha contratado al yucateco Hugo D’Urrutia, quien se ha encargado de hacer y difundir en redes sociales videos en los cuales se enfrenta al gobierno estatal y se intenta defender a los borgistas corruptos que saquearon al estado.
Y es que Félix González Canto está cada vez más desesperado conforme se acerca el fin de su periodo como senador pues bien sabe que perderá el beneficio del fuero y podría correr la misma suerte que Mauricio Góngora, Gabriel Mendicuti o su principal alumno: Roberto Borge.
Otra de las estrategias que ha sido denunciada por los mismos ciudadanos consiste en una serie de llamadas disfrazadas de encuestas telefónicas en las cuales se da información en contra del gobierno de Carlos Joaquín.
Las llamadas son realizadas de un número de la Ciudad de México que corresponde a la empresa Atento, una multinacional de customer relationship management (CRM) en el sector de business process outsourcing.
Ante tales ataques, el gobierno estatal estudia el interponer demandas contra esta empresa por prestarse a la guerra sucia contra la entidad.