Ante la pandemia, la alta inflación, las tensiones geopolíticas y el cambio en la política monetaria a nivel global, el Banco de México decidió el pasado 10 de febrero del presente año aumentar la tasa de interés de referencia en 50 puntos básicos para alcanzar 6%. La tasa de interés en nuestro país se coloca, por lo tanto, como la segunda más alta entre las economías más grandes de Latinoamérica con bancos autónomos, seguida de Brasil.
“Las presiones inflacionarias han sido de magnitud y duración mayor a la anticipada”. Señala el comunicado publicado por el banco. En enero la inflación anual llegó a 7.07% y las expectativas para el resto del año incrementaron, según indicó el banco, mientras que las de mediano plazo disminuyeron ligeramente y las de largo plazo se han mantenido estables en niveles superiores a la meta de entre 2% y 4%,. “Entre los riesgos globales destacan los asociados a la pandemia, las presiones inflacionarias, tensiones geopolíticas y ajustes a las condiciones monetarias y financieras”, precisó la institución.
La tasa de interés interbancaria es una herramienta poderosa de los bancos para evitar que la economía se “sobrecaliente”, es decir; que la actividad económica sea tan alta, que termine por impulsar los precios. Esta es la tasa que se usa como referencia en transacciones financieras, desde hipotecas hasta préstamos y tarjetas de crédito. De acuerdo con un análisis del Laboratorio de Comercio, Economía y Negocios (LACEN) de la UNAM, los rubros en los que los consumidores más utilizan su tarjeta de crédito para pagar son restaurantes, hoteles, alimentos, bebidas, alcohol, tabaco, vestimenta, calzado, vivienda y utilidades básicas y muebles para el hogar.
Banco de México también incrementó su pronóstico de inflación para finales de marzo de 6.7% a 6.9%, y estima que el tercer trimestre del año sea el pico de la inflación para el país. La cual deberá bajar gradualmente hasta converger a la meta en el primer trimestre de 2023, que llegará a 3.4%.
Es importante mencionar que el aumento en la tasa de interés provoca un decremento en el crédito y es un incentivo para invertir pues el rendimiento es mayor, por esta razón la economía tiende a contraerse, por el contrario una disminución en la tasa de interés provoca un mayor dinamismo en la economía.
Finalmente es de señalarse que la tasa de interéss influye en la economía del país, un índice bajo ayuda al crecimiento económico, ya que aumenta la demanda de productos, facilitando así el consumo.