Una tarde como ésta, pero de 1832, cerca de Dolores Hidalgo, Guanajuato, ocurría la batalla de El Gallinero, en la cual los rebeldes zacatecanos comandados por el Gral. Esteban Moctezuma, fueron derrotados por el Vicepresidente Anastasio Bustamante, cualquier parecido con la realidad contemporánea a 189 años de distancia es pura coincidencia.
Por aquello que el senador Ricardito Monreal, al no ser invitado al desfile de Independencia, optó por caminar sobre las calles del antiguo Paseo de la Emperatriz, hoy Paseo de la Reforma. Seguramente debido a que “ya saben cómo es, prefirieron no invitarlo”.
Por su parte, quien fue una invitada de honor y lucía distinguida como siempre era Olga Sánchez Cordero, lo intrigante radica en que desde su enroque en la Presidencia del Senado, la ministra en retiro no había visitado Palacio Nacional.
Al caminar por los pasillos del Salón Embajadores, seguramente Doña Olga, recordó aquel 26 de agosto, cuando ella le marcó por teléfono al -hoy- Secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, invitándolo al despacho del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
El cual, aseguran los confidentes de este tunde-máquinas, se encontraba en la capital del país, atendiendo asuntos personales (cof, cof, la Universidad de su hijo), sin saber que al entrar por la puerta 8, sería el primer tabasqueño en ocupar el Palacio de Cobián.
Y para mis queridos lecteres que duden de la amistad entre mis paisanos tabasqueños, Adán Augusto y AMLO, tan sólida es, que la corbata color vino que López Hernández portaba en el despacho del Presidente, le fue obsequiada por el propietario de la silla del Águila.
POST-ITEs sábado queridos lecteres, como saben este tecleador se reunirá con las y los amigos para celebrar, en esta ocasión por el aniversario 184 de la fundación de Tiffany and Co. en Nueva York. Joyería que tenía sede en la Av. Masaryk de la CDMX, la cual hoy se encuentra desahuciada, entre inseguridad por las noches y botes de basura abandonados.
¡Vaya reto tendrá el panista Mauricio Tabe, ante el abandono que le dejó Víctor Hugo Romo!