La importancia de diferencias entre informar actividades o informar resultados, permite que los niveles de saturación o satisfacción sean diferentes, ya que, por usos y costumbres, la mayoría de los informes a los que se hace alusión, se enfocan en las actividades, dejando un sinsabor que impacte positivamente o muestre la eficiencia del uso de recursos incluso de la trasparencia y rendición de cuentas de los mismos y a lo cual se está obligado, más aún cuando se habla de recursos públicos.
Las actividades son las acciones que se deben de hacer para la consecución de los resultados que se han marcado a través de los objetivos. De esta forma, cada objetivo específico necesita de una acción o conjunto de acciones determinadas y lógicamente relacionadas que posibiliten su consecución. Para ello, se debe planear la forma en que se organiza, suceden, complementan y coordinan las diferentes tareas que hay que realizar para el logro de las metas y objetivos.
Los resultados son justamente la materialización de lo que se plasmó como parte de un plan y que busca la satisfacción de necesidades y consecución de la aplicación de los recursos destinados para lo que fueron gestionados y lograr cumplir con lo prometido y proyectado.
La mayoría de las y los responsables de los gobiernos o instituciones, presentan informes de actividades, muchas veces forzadas o en otros casos repetidas, con la finalidad de justificar su trabajo o el tiempo que abarca el periodo respectivo, buscando siempre excusas y pretextos que les alcancen para exponer ante la ciudadanía las razones múltiples del por qué no se atendieron lo que un día fueron promesas, generando desilusión y decepción sistemáticamente y un gran desencanto.
En cambio, cuando se presentan resultados que van acorde a la función, planes, promesas y proyectos, está por demás mencionar las múltiples actividades o adversidades por las cuales se pasó, pues al final de cuentas los resultados son los que hablan, los hechos respaldan el dicho y lo superan y queda claro que los resultados son inevitables.
Es mejor presentar informe de resultados que informes de actividades, aunque vayan de la mano uno del otro, tiene sus grandes diferencias.
