ARMANDO TIBURCIO
@shumando
f shumando.tr
Trabajar y ser pobre
Poner fin a la pobreza en todas sus formas
en todo el mundo es uno de los 17
Objetivos Globales de la nueva Agenda
de la ONU para el Desarrollo Sostenible
hacia el 2030. Más de 800 millones de personas
en el planeta aún viven con menos de 1.25
dólares al día y muchas carecen de acceso a
alimentos, agua potable y saneamiento adecuados.
México está en la parte negativa de esta
circunstancia y no ayuda a conseguir la meta:
recién el Gobierno Federal puso el grito en el
cielo porque la CEPAL hizo saber que, a diferencia
de la mayoría de América Latina, somos uno
de los contados países donde la pobreza sigue
creciendo por causas del pésimo ingreso de las
personas. Otras mediciones lo corroboran: 53%
viven en condición de pobreza y de esos, 21% en
condiciones extremas.
En México se puede trabajar y ser pobre debido
a la contención de la política salarial, la desestructuración
del mercado de trabajo y la proliferación
de la economía informal. Tan simple, dramático y
absurdo como el hecho de que el Salario Mínimo
se encuentra por debajo de la línea de pobreza.
Frente al próximo 1 de Mayo, Día Internacional
del Trabajo, para hacer patente esta circunstancia
y exigir que se resuelva, varias organizaciones
sociales han lanzado la campaña “Quien
trabaja no debe ser pobre”. ¿Qué dicen al respecto
los sindicatos, también parte de la sociedad
civil organizada?