Hay priistas que se siguen preguntando “¿por qué perdió el PRI?”
Bien dicen que en política, la memoria del mexicano es tan corta, que después del saqueo por 70 años, volvió a darle vida al dinosaurio.
Habría que recordar lo ocurrido en las más recientes elecciones a nivel estatal para saber por qué perdió, y qué fue lo que hizo mal.
En el año 1993, cuando en una gran coalición opositora, Eduardo Pacho tenía asegurado el triunfo en Benito Juárez, de pronto, horas antes de la elección, este personaje renunció a la candidatura para salir huyendo del estado, de una manera por demás misteriosa.
Seis años después existió la enorme sospecha de que la gubernatura fue ganada en realidad por Gastón Alegre y la alcaldía de Benito Juárez por Elba Capuchino, y no por Joaquín Hendricks ni Magaly Achach, respectivamente.
Un año más tarde, Juan Ignacio García Zalvidea obtuvo la diputación federal del distrito 2 por el PAN y apenas en 2002 ganó la presidencia de Cancún, pero esa vez por el PVEM, mientras que Vicente Fox triunfó en Quintana Roo.
Ya en 2005, hubo voces que aseguraron que el mismo Chacho fue quien realmente ganó la gubernatura por el PRD a Félix González Canto, pero que los aluxes cambiaron las cifras finales.
Para 2006, en las votaciones para la presidencia, López Obrador del PRD ganó en esta entidad; en 2008 el también perredista, Gregorio Sánchez obtuvo el triunfo en Benito Juárez y el 2011, el mismo Greg tuvo que ser encarcelado en plena campaña, pues de lo contrario, dicen, hubiera barrido por la gubernatura. En tanto que en 2012, nuevamente el Peje ganó en este estado.
¿Entonces de qué se sorprenden? Sorpresa que aquí gane el PRI, de manera limpia.