Sin duda, para que algo suceda, requiere existir voluntad, y en Benito Juárez no se le ha visto desde hace varias administraciones municipales. Sobre la Imagen de Cancún hay muchos ejemplos, uno de ellos es la desastrosa señalización vial que padecen tanto los residentes como los turistas que deciden adentrarse un poco en la ciudad.
Siendo la ciudad de Cancún un destino turístico, se asume que debería estar dotado de un importante sistema integral de información, mapas y señalización, pero esto no es así, ya que este tema parece no preocupar ni al actual alcalde, ni al anterior, tal vez asumir este compromiso y ponerse a trabajar en contar con una buena señalización implique mucha atención, desgaste físico y hasta mental.
Tal vez muchos residentes conocen la ciudad y esto no les representa mucho problema, pero imagine un visitante a pie o con auto: llega a una Avenida que solo indica el nombre de las avenidas cercanas, pero nunca le indica el nombre de la vía sobre la que se está circulando, tampoco se indica el nombre de la que se está cruzando; y suponiendo que algún letrero le ayudase a saber en que dirección debe seguir para encontrar la calle que busca, nunca la encontrará, pues al llegar a la calle en cuestión no lo verá indicado en ninguna parte y seguirá de largo, provocando que la experiencia de haber osado conocer la ciudad sea decepcionante. Si en verdad existe el interés de que Cancún se fortalezca como destino, parte de la tarea debe partir de conocer la experiencia que vive el visitante y como se puede mejorar esta experiencia.
Al menos Paul fue honesto, desde un principio advirtió que él no tenia proyecto de trabajo, esperemos que la nueva administración si lo tenga.