A pregunta expresa, el Fiscal Miguel Ángel Pech respondió que no tenía su renuncia en la mesa.
¿Por qué preguntar una tontería tan grande? ¿Por qué jugar a las “fake news” en un ámbito dónde no hay espacio? ¿O es simple tontería del reportero?
El Fiscal es independiente. Es decir, no puede ser corrido por el gobernador porque, así de simple, la naturaleza de su cargo es la independencia del poder Ejecutivo del Estado. De ahí que su “nombramiento” haya tenido que ser aprobado por el Congreso y dura 9 años. ¿Sería tan complicado explicarles a algunos periodistas que existe separación de poderes?
La nota, “fake news” fue que el Fiscal no renuncia.
Esto fue, aparentemente, provocado por las declaraciones del secretario de gobierno, Francisco López Mena. Que ni siquiera fueron sacadas de contexto, sino interpretadas a modo.
Lo cierto es que el gobernador del Estado, Carlos Joaquín, tiene la capacidad absoluta de correr, con la figura amable de “pedir su renuncia”, a cualquiera de sus colaboradores. En el momento en que lo decida. Sin previo aviso. Sin ninguna explicación.
Y, creo, que lo que López Mena intentó, hombre de extrema buena educación, muy pulcro, fue decirle al gobernador que está listo. Como tendrían que estarlo todos los demás. Todo el Gabinete de Carlos Joaquín.
La figura de “tener la renuncia sobre el escritorio” es una cortesía al gobernador.
Todos tienen que tenerla desde el primer día en que fueron nombrados. Así es la naturaleza de los puestos públicos.
La falta de sensibilidad política de muchos periodistas, no entender la intencionalidad de las declaraciones de López Mena, ha provocado una gran corriente de “fake news”.
En cambio, lo que debía llamar la atención de los medios, son las “real news” de las ejecuciones de una pareja de policías, junto con su pequeño hijo, en una plaza comercial de Cancún.
Este es el nivel, de violencia extrema, de la lucha por la plaza. ¿Qué responsabilidad tiene en esto Remberto Estrada? Es lo que debe cuestionarse. ¿Qué sucedió con la llegada del anterior secretario de seguridad de Benito Juárez, Jonathan Yong? ¿A quién se “vendió” la plaza, a quiénes se permitió entrar a pelear por la plaza de Cancún?
¿Cómo es posible ejecutar a un comandante, a su compañera policía, a su niño, en la tarde de un sábado, frente a cientos de personas? ¿Qué protección tienen los asesinos? ¿Cómo pudieron huir?
Esas son las “real news” que tendrían que estar vigentes en nuestros medios de comunicación, ser sujetas a análisis, a investigación. Discutir públicamente una realidad de violencia apabullante es “real news” no supuestas renuncias.
Cuando así lo decida Carlos Joaquín, todos tendrán su “renuncia” en la mano…
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