Como anotación inicial: hacer la analogía de la realidad con el excelente título “Patas Arriba” de Eduardo Galeano… hasta duele.
El pasado miércoles 5 de abril, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong sostuvo una reunión en la ciudad de Cancún con el gobernador del estado, Carlos Joaquín González, representes de las fuerzas armadas y de seguridad pública de los tres niveles de gobierno y, aún cuando la reunión habría sido convocada para analizar la situación de la seguridad en la zona Cancún-Riviera Maya, los grandes ausentes fueron precisamente los empresarios de la Riviera Maya, con excepción de Jean Agarrista quien, objetivamente, no es representativo de todos los sectores empresariales. Ello ha generado la inconformidad y cuestionamiento del CCERM y las organizaciones empresariales.
Pareciera que uno de los objetivos de la visita de Osorio Chong fue hacer proselitismo como precandidato a la Presidencia de la República en la próxima contienda electoral del 2018. -¿En serio?- Las circunstancias hoy por hoy en la zona norte del estado son las peores en cuanto al tema de seguridad, pero no sólo ello; tenemos los mayores embates históricos de presencia de sargazo en las playas, una erosión que está rebasando el 100 por ciento de los arenales recuperados en 2010; la embestida del gobierno norteamericano, y de todo ello, resulta que la visita de Osorio Chong destaca, en primer término, el desprecio al sector que genera empleos y productividad en uno de los principales destinos turísticos del mundo, La Riviera Maya… -¡Bravo!-
Por si ello no fuera suficiente y para no dejar la menor duda de que el objetivo fue “sacar raja política” de una situación de emergencia, el señor Osorio Chong todavía se exhibió abrazado del dirigente del PRI, Raymundo King, los diputados locales y federales priístas (dicho sea de paso, muchos de ellos denunciados por actos de corrupción), para que todos los medios dieran cuenta de cómo funciona la vieja usanza. Claro, es absolutamente congruente, hay que recordar que la campaña proselitista del estado de México tiene el mismo tinte exhibicionista donde todos, hasta el Presidente de la República se abrazan frente a las lentes de las cámaras. Me recuerda el título de una revista anacrónica: “Así soy y qué”.
Sobra argumentar sobre la necesidad de la presencia de los empresarios de la Riviera Maya en la cónclave sobre seguridad; son éstos quienes tienen el pulso y padecen el embate de la delincuencia organizada.
Saludos.
