Hace unos meses el Eminente y Erudito presidente de nuestra Nación, anunció la apertura acelerada de la libre importación de gasolina y diésel, seguramente muchos de ustedes no se percataron de tal noticia pero en ella se nos aseguraba que con esta apertura habría mejores precios pero como en todo, hay un pelo en la sopa ya que a letras pequeñas se mencionaba que esto nos sería una total realidad sino hasta el 2018.
Por otro lado, las gasolineras empezarían a venderse a quienes desearan invertir, vender nuestra infraestructura a precios seguramente irrisorios pero que a la larga los beneficios serían enormes. Hoy en Cancún ya podemos ver una de estas nuevas gasolineras, ubicada a un costado de Plaza Las Américas con llamativos colores verde y azul y un nuevo nombre así como displays atractivos en cada una de las tomas. En el programa nocturno de Formula Financiera entrevistaron a uno de los involucrados hace ya un par de meses y el caballero en cuestión establecía claramente que la gasolina seguiría costando lo mismo en todas las gasolineras, que éste no variaría que la diferencia por el momento serían las grandiosas promociones que se estarían otorgando a los consumidores, como tarjetas de puntos , acceso a promociones no encontradas en ningún otro sitio y entonces debemos preguntarnos: ¿Dónde estará el beneficio?
Es increíble que una Nación con un potencial en la extracción de hidrocarburos tengamos que sufrir las consecuencias de uno que no los tiene: productos elevados en sus costos.
Ahora todos apresurarán su vehículo para surtirse en estas nuevas gasolineras de ilusión en espera de un milagro. ¿Usted qué hará?