No hay tiempo que no llegue ni plazo que no se cumpla, terminaron las campañas y luego de que a partir del primer minuto del pasado miércoles 1 de Junio entramos a un tipo de cuaresma electoral, por citarla de alguna forma, aunque no estamos hablando de un periodo litúrgico, pero si donde la ley contemplaba 72 horas de absoluto silencio sobre temas de difusión o propaganda política, hoy domingo todo ello concluye para dar paso a la verdadera encuesta.
Estos últimos tres días, debieron ser de reflexión, donde los ciudadanos con posibilidades de votar debemos concienciar el poder que tenemos para ejercer el sufragio gracias a la democracia en que vivimos.
Es importante citar que aquellos ciudadanos que acuden hoy a las urnas y anulan su voto, están regalando el sufragio de forma indirecta a cualquier partido o candidato.
Mas allá de que si usted es de los que piensa que todos los partidos políticos son iguales o que los candidatos todos son muy malos, yo le invito a que mas allá de estas premisas que usted podría tener en mente, considere que como electores es nuestra responsabilidad emitir el sufragio, en lo personal espero que usted amigo lector se haya tomado un tiempo estos días y lo haya meditado.
Desafortunadamente en Quintana Roo, la guerra sucia a sido el común denominador en estas campaña , lejos de denostar al adversario, lo que provoca de fondo es el alejamiento de los potenciales votantes , ya que se sienten desconfiados por el proceso electoral tan lleno de golpes bajos, otros golpes muy directos como ganchos al hígado que terminan derrumbando no a los candidatos que reciben el impacto, sino a los propios ciudadanos.