El gobernador Carlos Joaquín González tiene por obligación echar un vistazo a una serie de compromisos que hizo en campaña y que, si bien es cierto que apenas está por cumplir un mes en el mandato, la realidad es que aparenta haberse olvidado.
Sin embargo, claro está, que si olvidó los temas que lo llevaron a la gubernatura, pues aquí se los recordaremos con mucho gusto, pues la sociedad está ávida de que éstos se cumplan al pie de la letra.
Y es que quizá el tema toral, con el que conquistó la simpatía de la mayoría, es que actuaría en contra de aquellos que malgobernaron el estado y que lo dejaron al borde de la quiebra, cómo él mismo lo ha reconocido.
Muchos quisieran ver tras las rejas a más de dos que tuvieron las riendas en la entidad y que la saquearon, hasta ahora, con total impunidad. En este sentido habría que tocarle la campana para recordarle que en el caso de Veracruz ya existe orden de aprehensión en contra del prófugo Javier Duarte.
Sin embargo, a los quintanarroenses poco les importa lo que pase en Veracruz, y quieren más bien que se dé un movimiento en la entidad en torno al saqueo a mansalva, y no tanto para que se meta al bote a los supuestos bandidos, no, más bien para que regresen el dinero hurtado, como lo prometió en su campaña el hoy gobernador.
Ya es casi un mes de que rindió protesta y Joaquín González debe tener bien claro que la gente votó por él en gran parte por esos compromisos que causaron polémica en la opinión pública.
Bien dicen que la omisión lo podría hacer cómplice, cuando la realidad es que Carlos Joaquín fue una víctima de la represión que se vivió durante cinco años y nueve meses.
