Parece una contradicción decir que en momentos de crisis podemos ser felices, sin embargo, reflexionar en un sentido más amplio sobre el significado de ser feliz, nos puede ayudar a integrar ambas nociones.
La mayoría de nosotros asociamos felicidad con emociones relacionadas con la alegría y la dicha.
Al estudiar la felicidad los investigadores hemos encontrado que la felicidad tiene que ver con un estado más amplio de bienestar que supera los instantes de dicha y alegría que todos experimentamos periódicamente en nuestra vida.
El estado de bienestar es el resultado de la puesta en práctica de tus habilidades para vivir, lo que te permite no solo disfrutar, sino tener esa sensación interna de completud que habita en las profundidades de tu ser.
Practicar y desarrollar habilidades para la vida te facilita reunir, incrementar y renovar constantemente ese capital para la vida que se acumula dentro de ti y del que harás uso justamente cuando las crisis de la vida llegan.
Que mejor legado para ti y tus seres queridos que abocarte a formar tu capital de vida a través de conocer tus emociones para manejar ese estrés que se forma por las crisis de la vida, solucionando de forma pacífica y creando nuevas formas de enfrentar los momentos difíciles.
Aquí te platico lo que un autor, considerado el padre de la psicología positiva, Martin Selligman, nos dice sobre un modelo, una guía, una brújula, que debemos de estar revisando constantemente en nuestras vidas para crear ese capital para la vida del que hablamos.
Él recomienda cultivar cinco aspectos en tu día a día: 1) tus emociones positivas, 2) Tu capacidad de involucrarte de forma comprometida, 3) Tu disposición a establecer relaciones de forma positiva 4) Tu sensación profunda de significado y sentido de vida, 5) Tu facilidad para establecer y completar tus metas.
De tal manera que la vida placentera, es decir la capacidad de disfrutar con alegría y dicha, se complementa con la vida involucrada, que pone en juego tus fortalezas y tus virtudes y con esa vida llena de sentido a la que todos aspiramos y que se refiere al significado profundo de cada amanecer y cada anochecer en tu vida. Reflexiona en estos cinco elementos ¿cómo están hoy en tu vida? y cultiva tu capacidad de gozo, tu capacidad de vincularte y tu capacidad de sentirte con plenitud de sentido.
Consulta mi página www.mariaelenacastro.com, transformando vidas a través del bienestar.