El tiempo nos dará la razón acerca del resultado de los juicios iniciados contra el rapaz de cuello blanco, Don Borge; habrá que esperar y hacer predicciones pues ya hemos comprobado que nos resulta muy fácil atinarle y ciertamente; desde un punto muy particular, me parece que no será condenado ni económica ni físicamente, que no devolverá nada de la fortuna que le pertenece al pueblo quintanarroense (incluyéndole a usted que no se considere), que lo que se le podrá arrancar, serán las propiedades que vendió para que regresen a manos del estado.
Finalmente estamos viendo una versión tropical de la saga de las películas de Freddy Krueger, ese criminal que nunca se pudo reformar y pasó a cometer peores cosas conforme pasaba el tiempo y en el comparativo de nuestros políticos, es lo mismo, por ello la ciudadanía no puede cimbrar sus expectativas de un cambio desde ellos, sino la misma sociedad necesita iniciar desde el seno familiar, desde las estructuras del entendimiento por el bien común en los chicos, para que al pasar el tiempo, después de varias generaciones, entonces se puedan apreciar cambios reales.
Jueguen a apostarle a las nuevas generaciones, siendo ustedes el ejemplo mismo de lo que esperan para su sociedad; no esperen que en ésta, su generación, se triunfe sobre las malas administraciones; llega un año más con otra oportunidad de tiempo para todos, aprovéchenla y esperen a ver cambios a futuro.
Votemos por que las madres, de todas las condiciones sociales, logren conciencia sobre el valor de la educación basada en el bien común para sus hijos, que ejerzan el poder que tienen para cambiar a la sociedad, que enseñen visualizando un futuro mejor.