Uno de los problemas perrunos que más preocupan a las personas es cuando el peludo en cuestión no quiere comer. Y claro, existe una amplia variedad de razones por las que los perros rechazan el alimento.
En primer lugar, hay que analizar lo que significa para tí que “el perro no come”… Es decir, ¿rechaza por completo el alimento? ¿O no come tanto como indica la guía del empaque? Porque la verdad es que muchos perros nunca alcanzan a comerse la cantidad de tazas que marca el empaque del alimento, según su tamaño y edad.
Cuando de plano, el perro no quiere comer, llamamos al signo anorexia, que es la pérdida total del apetito. Esta es diferente de la anorexia nervosa de los humanos, que es un trastorno alimenticio.
La pérdida total del apetito en los perros y los gatos puede ser indicativo de alguna enfermedad, así que es importante que lleves de inmediato a tu mascota con el médico veterinario, sobre todo si es una conducta anormal en tu perro.
Recuerda, aunque los perros, en general, pueden pasar un par de días sin comer (no los perros de raza mini como los chihuahueños, los yorkies, etc. y tampoco los cachorros y las hembras gestantes), es mejor diagnosticar y atender el problema a la brevedad.
Aquí te presento algunas causas por las que los perros pueden dejar de comer:
Enfermedad. Si se siente mal, tiene fiebre, diarrea o vómito, seguramente dejará de comer.
Enfermedad en la cavidad oral.
Vacunación reciente. Aunque las vacunas han salvado la vida a millones de perros en los últimos 100 años, al prevenir enfermedades muy peligrosas para los perros, a veces pueden tener efectos secundarios leves, como ocurre con los bebés o los niños. Estos efectos son de corta duración y no son de cuidado.
Viajes o cambios en el entorno. Si tu perro comía de forma normal antes de emprender un viaje o antes de cambiarte de casa, puede ser que no quiera comer por el entorno nuevo. Algunos perros también se marean en el carro, mientras que otros pueden sentirse nerviosos o incómodos cuando se les saca de su ámbito o se les lleva a un sitio nuevo.
Apetito selectivo. Algunos perros son sencillamente melindrosos, o tienen problemas de conducta, generalmente asociados a nuestra propia ansiedad. Otros se rehusan a comer si están en una situación incómoda, por ejemplo, en presencia de un perro dominante o un plato a una altura inadecuada. Pero ya sabes, como la anorexia es un signo de enfermedad, no asumas que tu perro es solamente melindroso o selectivo, ante la duda, consulta a tu médico veterinario.
La nutrición adecuada es fundamental para mantener la salud de tu mascota. La mantiene sana y feliz. Sin embargo, no existe una receta universal para seleccionar un tipo de alimento o la frecuencia de alimentación para cada individuo. Por ejemplo, los requerimientos nutricionales varían dependiendo de la raza, la edad el tamaño y la salud de tu mascota, así como de su actividad diaria. Las dietas comerciales de buena calidad están diseñadas para satisfacer todas las necesidades nutricionales de tu mascota. Sólo debes seleccionar la más adecuada para su etapa de vida, sea cachorro, adulto, hembra esterilizada o gestante, etc. Asegúrate de que el empaque diga que es una dieta COMPLETA y BALANCEADA. Es decir, que cubre todos los requerimientos nutricionales.