No se usted mi estimado lector pero hoy en la mañana de nueva cuenta me hice la pregunta en torno a lo que sucede en Cancún, del porque he comenzado a tener miedo ante tanto ejecutado y del porqué del desconcierto y hartazgo de eta ciudad, luego de vivir en ella por casi treinta años.
El tema de las violencias y la inseguridad domina hoy los encabezados de los medios, de cómo Quintana Roo se ha transformado y en especial Cancún, al ajeno imaginario de los extranjeros que continúan arribando al solo conocer de nuestro destino sus playas, su comida y la riqueza cultural de nuestros mayas y que no obstante, seguro desconocen la terrible imagen desde hace 6 meses que está traspasando las fronteras por una “guerra entre los carteles” que no solo atemoriza a los que vivimos aquí sino el miedo que puede provocar para que no lleguen más visitantes por tanto ejecutado, baleado y tanta extorsión.
Desde que comenzó el año con un descabezado y con el “gordo” anoche ejecutado afuera de un antro sumaban 10 las ejecuciones documentadas y donde el uso de armas y las descuartizaciones se suman a las 2 del día de hoy en los alrededores del 28 donde tres han sido en febrero.
Mi estimado Remberto, que respuesta a la pregunta unísona nos vas a dar, al estar los cancunenses hasta la madre para que ya no sintamos miedo o para que junto a nuestras familias estemos a salvo de no encontrar una bala perdida en un antro o restaurante de la Ciudad. Considero ante tu pasividad y silencio, debieras sentir la responsabilidad de no traicionar a aquellos que te eligieron para gobernar a cambio de dadivas o mochilas, pero para mí que no vote por ti, considero que tu omisión y falta de inteligencia policial me está preocupando como a muchos ciudadanos quienes ya ni a nuestras mascotas podemos pasear en los parques y calles por las noches por temor a sufrir un asalto.
Posiblemente la violencia extrema no existe y que al no haber signos de presencia de un crimen organizado no debiéramos preocuparnos ya que dirías tu ser éstos, solo incidentes típicos de cualquier ciudad triunfante, pero para quienes llegamos a vivir a Cancún, tu consejo de comenzar a acostumbrarnos a ver más armamento, secuestros u otros pequeños incidentes violentos sin importancia no lo vamos a permitir.
Tenga presente que la responsabilidad del municipio de velar por nuestra seguridad es suya y no de Carlos Joaquín y ni tampoco la que afrontamos hace tiempo fue de Borge.
Mientras nos responda dejo una buena sugerencia a campañas publicitarias de promoción para el destino… “Cancun, el lugar que usted pensó que conocía”.