En Cancún, no hay duda que el sector más acomodaticio, el que quiere que todo lo haga Papá Gobierno, el primero que pega el grito cuando ve que algo no le gusta, incapaz de mover un dedo, ese ha sido siempre el hotelero, el que piensa que este destino le debe todo y no al revés.
Sin embargo, vaya sorpresas que da la vida. Hoy, precisamente el gremio de los hoteleros de Cancún le da una enorme muestra de civilidad, de responsabilidad a esta ciudad.
Y es que en días pasados la Asociación de Hoteles de Cancún, que no aglutina a todos, pero sí a la mayoría, aprobó por unanimidad de sus integrantes el otorgar un día de descanso con goce de sueldo a todos los trabajadores de los centros vacacionales que muestren que ejercieron su derecho al voto, mostrando su dedo pulgar pintado con tinta indeleble el próximo 5 de junio.
Buenísima decisión.
Pero no sólo eso, sino que además Roberto Cintrón propuso y se avaló que todos los trabajadores de los hotelas puedan llegar dos horas más tarde a sus labores para permitirles hacer fila tranquilamente y sufragar como todo ciudadano responsable.
De hecho, cabe mencionar que el grupo Xcaret también se sacó un diez nuevamente al otorgar entrada libre a todo quintanarroense que llegue a su taquilla con su dedo marcado ese domingo 5 de junio.
Eso es crear conciencia ciudadana, eso es ver por el bien del estado y de la ciudad, eso es anteponer el interés generalizado al particular, eso es estar interesado en el bienestar común, porque si se respeta la democracia, todos saldremos ganando.
Ojala todos los sectores tomaran ese tipo de decisiones y le dieran chace a sus trabajadores de al menos ir a votar, porque hay que entenderlo así: Ese es su derecho ciudadano y obligación civil.
