Después de escuchar al doctor Manuel Mireles en diferentes medios de comunicación, quien fuera dirigente del grupo michoacano de autodefensa ciudadana, que ha sido acusado de actuar en la ilegalidad, de violentar el estado de derecho y de ser un ex convicto; Mireles ha rechazado las imputaciones y señalado que el movimiento de resistencia que encabezó, surgió por el hartazgo de ser víctimas eternas del crimen organizado ante la inacción o complicidad de las autoridades. Un Mireles y una lucha que nada tiene que ver con el protagonismo en Quintana Roo de un empresario cozumeleño llamado Carlos Mimenza, de quien se dice fue uno de los más beneficiados durante los gobiernos priistas en la entidad, al inicio de lo que él llama “ lucha ciudadana”, denunció primero al ex gobernador Roberto Borge, siguiendo con el senador Félix González, denuncias que hasta la fecha no tienen ni pies ni cabeza, en todos los videos donde aparece este personaje promete dar pruebas, exhibir a tal y cual sin que hasta hoy se tenga conocimiento de estas, por eso llama la atención ese cambio repentino de atacar al gobernador Carlos Joaquín González.
Recordemos que los grupos de autodefensa ciudadana son parte de un movimiento social de liberación apoyado por gente y apertrechado con armas recogidas a los criminales que huyen tras cada enfrentamiento. Es un movimiento social, no una guerra contra el gobierno o el Ejército, mucho menos contra el estado. Es un movimiento contra la delincuencia en cualquiera de sus modalidades, desde el robo de un alfiler hasta el secuestro y la ejecución.
En Cuba, Venezuela, Bolivia, han sido o son los capitalistas, los poderosos empresarios y demás sectores aburguesados los que levantan sus protestas contra el gobierno porque no quieren perder sus riquezas y privilegios, ¿será este el caso de Carlos Mimenza? Así que no es igual, no se puede decir que es lo mismo. Muchos estamos contra todo tipo de gobierno, pero sabemos diferenciar entre los que apoyan a los trabajadores y los que sólo sirven al capital.
En Quintana Roo no podemos permitir siquiera que se lance, así como si nada semejante anuncio como el exhibido en redes por este empresario, sólo personajes que viven del chantaje, del engaño, de inducir al miedo pueden amenazar con la creación de estos “Grupos de Autodefensas”. Quienes están medrando con la información, tratan de desorientar a la sociedad o están buscando un protagonismo político o claramente una actitud de desestabilización, de incertidumbre. Debemos actuar con estricto apego a derecho, nadie debe tomar la justicia en sus propias manos.
