Sigue siendo lo mismo. Los personajes principales son exactamente los mismos, pero más ancianos. Nuevamente un personaje cercano a Andrés Manuel López Obrador es filmado a escondidas recibiendo dinero. Primero fue “El Señor de las Ligas”, René Bejarano, hace más de 10 años, y ahora Eva Cadena, diputada local y candidata a la alcaldía de Morena en Choapas, Veracruz.
Y es cierto lo que dice AMLO: “Están muertos de miedo los de siempre: Carlos Salinas, Vicente Fox, Felipe Calderón y ahora Enrique Peña Nieto”. Nadie lo duda, como tampoco se puede poner en tela de juicio la veracidad del video, la forma en que la ahora ex aspirante por Morena recibió 500 mil pesos “para López Obrador”. Así se le aclaró, y así lo aceptó.
Que si es una maniobra perversa, sí lo es. Que si nuevamente quieren enterrar a AMLO con marranadas, también lo es. Pero otra vez queda clara la forma en que el sempiterno aspirante a la Presidencia se hace de recursos.
Nada justifica esto que, a su vez, es un secreto a voces, algo que AMLO siempre se ha encargado de ocultar ante la permanente pregunta: ¿De dónde obtiene recursos para su eterna campaña que lleva ya 11 años?
Pero aun así, López Obrador insiste en desmarcarse y acusa “a los rufianes”, a los que tendieron la trampa, pero que la realidad dicta que ni ellos ni nadie obligaron a su gente a recibir el dinero.
¿Dinero de quién?, ¿dinero sucio? Es la incógnita, la cual, por cierto, en este país ya no asusta a nadie y menos si se trata de política.
Sin embargo, aquí el único culpable es AMLO por confiar en una persona como Eva Cadena, capaz de recibir dinero de “empresarios de la zona”, es decir, de gente supuestamente desconocida. Supuestamente.
Una vez más, reitero, el peor enemigo de AMLO es AMLO.