LÁZARO CÁRDENAS.- La obesidad y la diabetes mellitus son los principales enemigos de los habitantes de la zona maya, donde la Secretaria de Salud ha intensificado campañas de prevención y detección en las últimas fechas; sin embargo, de manera cultural prevalecen los hábitos alimenticios que alientan a estas enfermedades.
Aunque a nivel local las autoridades no tienen cifras exactas sobre la incidencia de esas enfermedades, es notorio que la mayoría de los habitantes viven con sobrepeso y diabetes, dos de las cinco principales enfermedades crónicas causantes de muerte en Quintana Roo. La diabetes es la primera causa de mortandad a nivel nacional y estatal.
“Tenemos cinco importantes enfermedades crónicas, la diabetes, la hipertensión, las dislipidemias, que son las alteraciones del colesterol, los triglicéridos, los problemas de obesidad y del síndrome metabólico. Las enfermedades de mayor prevalencia son las de adultos mayores de 20 años y la Secretaría de Salud tiene sus estadísticas, pero las demás instituciones y médicos particulares tienen las suyas”, señaló un comunicado de la dependencia.
“La Secretaría de Salud maneja alrededor de 6 mil pacientes en tratamiento y alrededor del 55% están controlados. Si es que sacamos un promedio de todas las instituciones y particulares, oscilamos alrededor de los 12 mil pacientes”, indicó el responsable del área de estas enfermedades en Kantunilkín. Prosiguió el comunicado.
De acuerdo con cifras publicadas, en año y medio, 2017 y lo que va de 2018, en Quintana Roo se han diagnosticado casi 20 mil personas con obesidad, todas susceptibles a desarrollar enfermedades crónico-degenerativas como diabetes e hipertensión.
El Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Sinave) reveló que sólo en este año se han detectado a 6 mil 900 personas obesas, de las cuales, 4 mil 288 son mujeres y el otro porcentaje son hombres.
Eugenio Balam vecino de Kantunilkín sufre de obesidad, que incluso le afecta en estos meses fríos, ya que padece una alergia que le dificulta respirar.
Sin embargo, en broma dice: “pero no se puede despreciar, los chicharrones, la cochinita y el relleno negro, total, ahí en la última morada no hay”.
Mario Pech quien sufre de diabetes mellitus no oculta su molestia por la pérdida de peso que ha sufrido en los últimos años; sin embargo, comenta que tal vez se deba a las formas de alimentación local. “El doctor me recetó una dieta balanceada, pero dónde vamos a conseguir los alimentos necesarios si en todo Kantunilkín sólo se comercializan comidas saturadas de grasa, ya que la fruta tiene sus precios por los cielos”, comentó.
LO QUE NO MATA FORTALECE
Tanto don Eugenio Balam como Mario Pech reconocieron que la cultura local es muy hermosa, sobre todo por su comida tradicional, ya que se tiene la costumbre de que en todo tipo de fiestas ya sean comunitarias o sociales sobresalgan la cochinita, el relleno negro entro otros platillos elaborados con res o cerdo.
“Mira si te das cuenta esto es de poco tiempo atrás ya que anteriormente nuestros abuelos sólo consumían cosas naturales como la pepita de calabaza, chaya, camote, atoles entre otros productos naturales que les permitían longevidad, pero ahora las cosas son diferentes, ya que la gente ya no camina prefiere pagar 10 o 15 pesos para que los lleven en un triciclo y por consiguiente se agrava el problema de salud”, expresaron.
Una muestra de los puntos de vista de los entrevistados se presenta con la fiesta tradicional de Kantunilkín, donde a partir del 30 de noviembre hasta el 12 de diciembre, seguido de la fiesta de la Virgen de Guadalupe, posadas navideñas, la del Niño Dios y finalmente los 3 Reyes Magos, se sacrifican un promedio de 600 cerdos que se comparten en cochinita pibil, relleno negro y otros cocimientos que, desde luego, van acompañados de cervezas, refrescos y los postres locales. “A ver dime quien va a despreciar todo esto” dice riendo don Mario Pech.
ACCIONES A FAVOR DE LA SALUD
Por su parte la Coordinación de Salud Municipal promueve actividades culturales y deportivas, así como caminata en las calles de Kantunilkín con el fin de fomentar la actividad física tanto de padres de familia, abuelos y niños.
En Holbox, la actividad física se reactiva a través de ejercicios de zumba que motiva a decenas de mujeres a participar diariamente en los ritmos en sus diversas modalidades.
Marco Antonio Pool Baas, promotor de estas actividades, dijo que estas actividades han tenido una gran respuesta, sobre todo que motivan en forma grupal a las mujeres a mantenerse en constante ejercicio, limitando la obesidad que los doctores recomiendan disminuir.
“Hasta ahora tenemos un promedio de 100 mujeres que diariamente se ejercitan, esto ha logrado en forma increíble que se limiten esos problemas de salud y de carácter, antes algunas venían malhumoradas pero ahora las cosas han cambiado y seguiremos zumbando por el bien de los habitantes de Holbox” puntualizo.
LUIS MÉNDEZ
GRUPO CANTÓN
