Roberto Lemus / Grupo Cantón
Una mujer de 22 años que conducía en estado de ebriedad derrapó junto a su hija de tres años en la entrada del fraccionamiento Aldea
TULUM.— Un nuevo accidente de tránsito en el municipio puso en evidencia la vulnerabilidad de los menores que viajan en motocicletas sin las medidas de seguridad adecuadas.
Una mujer de 22 años que conducía en estado de ebriedad derrapó junto a su hija de tres años en la entrada del fraccionamiento Aldea Tulum.
La menor sufrió golpes en la cabeza y una lesión en la pierna.
Paramédicos confirmaron que las heridas no ponían en riesgo su vida, pero requirió atención médica inmediata.
El percance ocurrió cuando la conductora, identificada como María “N”, perdió el control de la motocicleta al intentar ingresar al fraccionamiento. Testigos aseguraron que la niña, que llevaba únicamente un casco de plástico, quedó tendida en el suelo llorando mientras pedía ayuda.
La rápida intervención de vecinos permitió que la emergencia fuera atendida de inmediato. Minutos después, paramédicos trasladaron a madre e hija al hospital.
El caso fue notificado al DIF Tulum, en tanto la GEAVIG abrió una investigación contra la madre por conducir bajo los efectos del alcohol y por poner en riesgo a la menor.
Autoridades locales reiteraron que conducir en estado de ebriedad y sin equipo de protección es una de las principales causas de muertes y lesiones graves en el municipio, donde las motocicletas son el vehículo más usado por la población.
Destacaron que los niños, al ser más frágiles, deben contar con equipo de seguridad certificado y nunca viajar en condiciones de riesgo.
