Jazmín Ramos / Grupo Cantón
Refirió que el turismo está en constante evolución, lo que da pie a nuevos modelos de hospedería; sin embargo, es necesario establecer reglas para que haya igualdad en las operaciones. Ya se vio en los años 80, cuando surgió el tiempo compartido, que hubo voces que lo satanizaron y finalmente se encontró el punto de equilibrio.
“Las rentas vacacionales son un fenómeno que hay que entender y evolucionar. A futuro, las cadenas hoteleras van a empezar a ofertar inversiones inmobiliarias turísticas bajo este esquema, en el que los huéspedes comparten la propiedad de un inmueble residencial, lo utilizan algunas semanas al año y la cadena se encarga de administrarlo el resto del tiempo”.
En ese sentido, dijo que, más allá de rechazar los cambios que presenta la industria turística, los gobiernos y la iniciativa privada deben trabajar en conjunto para sentar reglas que regulen la actividad, permitiendo abrir nuevas oportunidades de negocio que finalmente beneficien al destino.
Insistió en que la industria está en constante movimiento y las rentas vacacionales son parte de los cambios que registra la actividad; así es como debe verse como una evolución del turismo; ya se vivió con el tiempo compartido y ahora las cadenas hoteleras lo adoptaron.
Además, refirió que con la actualización del Reglamento de la Ley de Turismo en Quintana Roo, los 11 municipios del estado tendrán la facultad de regular, limitar o autorizar la operación de plataformas digitales y rentas vacacionales en determinadas zonas.