Licety Díaz
Grupo Cantón
Cancún.- A sus 29 años,Paula Villanueva Rosado, es una cancunense de hueso colorado por el activismo, disruptiva y líder de opinión que va escalando en sus propósitos tras la experiencia adquirida, a punto de terminar su carrera de Derecho, fue presidenta de la Sociedad de Alumnos de la Universidad Anáhuac campus Cancún, así como titular y fundadora de diferentes proyectos.
QH: Empecemos por ahí Paula, ¿cómo cerraste esta etapa de presidencia, cuéntame de esos proyectos?
Paula: Entre los proyectos que fundé, coordiné visores ciudadanos en el alcoholímetro y en centros nocturnos para prevenir el ingreso de menores a estos establecimientos, así como diferentes programas para conducir a la juventud al sector público y privado.
QH: ¿Cómo catalogas tu trayectoria como activista?
Paula: Los definiría como disruptivo, mi trayectoria ha sido dar espacio y vincular a la juventud con quienes toman las decisiones a fin de construir un puente, darles voz y visibilizar problemáticas sociales. Acercar a los jóvenes a la clase política y empresarial, vincularlos e invitarlos a que se sumen a participar iniciativas a beneficio de la ciudad. Ejemplo de esto es que he organizado talleres, capacitaciones, conferencias, proyectos de acción social como colectas, rifas, reconstruir casas en colonias populares con donativos de la sociedad civil, así como rehabilitación de espacios públicos.
QH: Hace cinco meses comenzaste con tu programa “Secretos de poder”, ¿cómo combinas el activismo con este programa?
Paula: Surge con la intención de incitar al análisis y a la reflexión de situaciones de relevancia para la ciudadanía, pero si bien es un enfoque informativo y periodístico, también es un enfoque a los valores y que la gente tenga voz porque también tenemos gestión social, denuncias ciudadanas. Las entrevistas se basan en conocer a las personas detrás de un cargo y cuestionarlos.
La forma en que se ve el activismo de Paula Villanueva, por medio de los secretos del poder es darle voz a la ciudadanía e incitando a la reflexión, que la gente se lleve un análisis profundo de las entrevistas, generen un criterio propio, lo cual es valioso e importante. Informar es una de las labores más nobles porque son muy sacrificadas, cuando te toca ser la voz tiende a ser complicado porque hay muchas líneas e intereses, es difícil informar, pero buscamos hacerlo de forma contundente.
