El médico indicó que incluso fue intimidado por la FGE porque lo han buscado en Durango, lugar donde reside
CRISTINA ESCUDERO
GRUPO CANTÓN
CANCÚN. El doctor Miguel Ángel Luna Calvo, padre del niño Leo que falleció el pasado 28 de marzo en Quintana Roo, luego de haber sido succionado por una corriente de la atracción conocida como “Lodorama” en el Parque Xenses, declaró que tiene miedo de sufrir alguna represalia, ya que el Grupo Xcaret es muy peligroso y que incluso fue intimidado por la Fiscalía General del Estado (FGE) porque lo han buscado en Durango, lugar donde reside.
El padre de Leo ofreció una amplia entrevista para un canal de YouTube que dirige Diego Saúl Reyna y que tiene más de un millón de suscriptores, ahí dejó en claro que lo único que busca que la empresa se haga responsable y la autoridad actúe, pues se enteró que la rejilla que dejaron abierta y que estaba succionando a su hijo, estuvo así desde el mes de octubre y que incluso la cerraron hasta cinco días después de la muerte de su hijo.
También comentó que se enteró por los medios que el Grupo Xcaret pretende demandarlo por difamación, situación que le parece extraña, pues asegura que no lo ha hecho y que lo único que ha dado a conocer es que los rescatistas no tienen la preparación adecuada para atender casos como el de su hijo y que en ningún momento obstruyó la labor de ellos, pero él como médico tiene todos los conocimientos necesarios para atender una situación de emergencia y más aún si se trata de la vida de su hijo.
En la entrevista aseguró que un extrabajador del Grupo Xcaret, le dijo que ya han ocurrido otros accidentes en los parques, pero que por alguna razón son ocultados, ya que no se notifica a emergencias, y se acude a una clínica particular.
El doctor Luna Calvo recordó que cuando su hijo falleció, acudió a la Fiscalía General del Estado para tratar de obtener la liberación del cuerpo; sin embargo, llegó cuando todavía no habían sido notificados, y luego, en una nueva irregularidad, llegó al lugar un trabajador de Xcaret con el certificado de defunción, documento oficial que no tendrían por qué tener ellos, por lo que se los arrebató.
Por otro lado, dijo después de otras seis horas, que estuvo en la fiscalía, pidió que dispensaran de la autopsia a su hijo, por lo que se puso de rodillas y llorando, les pidió el cuerpo de su hijo, indicando que firmaría lo que fuera.
