KANTUNILKÍN,Quintana Roo.-Salió a relucir la mala calidad del mercado municipal cuya “remoción” habría gestionado la ex alcaldesa María Trinidad García Argüelles, para lo cual invirtió recursos por la cantidad de 8 millones de pesos, de acuerdo a un dictamen que realizó Protección Civil y las autoridades de la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Esto quiere decir que la administración de la Argüelles declaró una calidad inherente al uso de determinados materiales, cuando en realidad, aplicó de menor calidad y en menor cantidad, lo que supone un presunto acto de corrupción.
Una fuente reveló que el Ayuntamiento no ha invertido ningún recurso para la reparación, porque la mitad del recurso aplicado es de la Federación y están en los trabajos de las auditorias; la otra parte fueron recursos propios del Ayuntamiento de Lázaro Cárdenas.
De acuerdo con el levantamiento de la dependencia, el inmueble no garantiza la seguridad de los locatarios que realizan la venta de hortalizas, y de entrada tendrían que abandonarla, ya que también podría peligrar la vida de los usuarios porque puede derrumbarse el techo.
En cambió la Cofepris dictaminó que el drenaje sanitario no tiene las medidas de salud e inclusive salen olores fétidos por las aguas negras y por esa razón se tomó la decisión de que en los próximos días será acordonado el local con el apoyo de Protección Civil.
Reblandecido
De igual forma con las precipitaciones pluviales que iniciaron dentro del inmueble entre más agua y en la orilla de los techos están todos deteriorados y es un peligro para las familias.
Un locatario que omitió su nombre por temor a represalias reconoció que algunos de sus compañeros mal interpretan la decisión de las autoridades, ya que no es por ninguna cuestión política, sino que son por medidas de seguridad y de salud de las familias.
Fuentes fidedignas aseguran que la obra fue construida por una empresa creada por su esposo, Joselin Ávila Correa, que utilizó como prestanombre al italiano, Luigi Dianeleto y durante los trabajos hubo una serie de inconformidades de la obra local, porque se contrató a trabajadores del vecino estado de Yucatán, supuestamente porque ahí la mano de obra es más barata. (Raúl Balam/QUINATANA ROO HOY)