La alcaldesa ambiciosa no conforme con su fortuna, aspira a entrar en el negocio de venta de energía eléctrica, por lo que le urge conseguir esos predios
Cristina Escudero
grupo cantón
Cancún. La presidenta municipal de Puerto Morelos, Laura Fernández Piña, sigue firme en su ambición de amasar una fortuna y no contenta con haber recibido el año pasado la “donación” de 10 hectáreas donde supuestamente se construirá una planta de aguas residuales, ahora exige al presidente del comisariado ejidal Braulio Núñez López, que le entregue 18 lotes más para realizar un Parque Eólico que entregaría a su pareja sentimental.
Al asunto de este parque eólico que es promovido junto con su jefe político, Félix González Canto, del que esperan obtener millonarias ganancias, se le suma que infla los precios de la obra pública, como ejemplo el “Piso Firme” que se realiza con los costos más altos de todo el estado para robarse parte del presupuesto.
VIENTOS DE RAPIÑA
De acuerdo a los habitantes del Ejido Puerto Morelos, es el mismo Núñez López, en complicidad con la edil, quien los ha estado presionando para que se le entreguen 18 lotes y áreas comunes a Fernández Piña y los cuales forman parte del proyecto Polígono 795 que cuenta con un total de 168 lotes que se ubican a un costado de la zona donde planea el gobierno municipal construir el Parque Eólico “Puerto Morelos Park” y que le generaría una fortuna con la venta de energía eléctrica. En mismo presidente ha denunciado la manera leonina en que se fundamenta esta supuesta venta de energía ecológica.
A la empresa GIISESA, donde el esposo de Fernández Piña es socio, se la han entregado concesiones millonarias para trabajos de alumbrado público en Leona Vicario
Para esta triquiñuela, Laura Fernández también cuenta con el apoyo de su pareja sentimental Carlos Alberto Moyano Menchaca quien es socio del Grupo Internacional de Ingeniería y Consultores de Empresas en Construcciones Electromecánicas (GIISESA), S.A. de C.V., que es la empresa que se encargará de la creación del parque eólico.
La alcaldesa quiere imponer a su protegido como candidato mientras ella buscaría una diputación federal. Por ello ha lanzado diversas estrategias para doblegar a los ejidatarios que se resisten a entregarle en donación otras 18 hectáreas en una zona de alta plusvalía del municipio de Puerto Morelos; para lograr su cometido Laura Fernández ha desplegado a un grupo de funcionarios al servicio del Ayuntamiento.
Es cuestionable que la empresa Grupo Internacional Ingeniería y Consultores de Empresas en Construcciones Electromecánicas (GIISESA), S.A. de C.V., representada por Francisco Javier Juárez Tec, es la consentida de Laura Fernández, pues en su corto período de gobierno le ha otorgado dos concesiones: Una por un monto de cuatro millones 284 mil 935.44 pesos por los trabajos de rehabilitación, ampliación y modernización de la red de alumbrado público en la delegación Leona Vicario.
El mandato de la edil se ha visto manchado por la corrupción y el nepotismo
Y la segunda, se adjudicó la rehabilitación, ampliación y modernización de la red de alumbrado público en las colonias 23 de enero y Joaquín Zetina Gasca por un monto de ocho millones 229 mil 963.50 pesos. La empresa que se encuentra en el municipio de Atizapán de Zaragoza, Estado de México, está representada por los señores Gudelia Tec y Tamayo, y los hermanos Alejandro y Francisco Javier, ambos de apellidos Juárez Tec.
CÓMPLICES
Pese a que los comuneros han pedido una reunión con el presidente del comisariado ejidal para que les exponga el supuesto proyecto y la razón por la que deberían entregar dichos lotes a la alcaldesa, éste se ha negado argumentando el distanciamiento social por la pandemia del Covid-19.
Sin embargo, los 150 ejidatarios de Puerto Morelos descubrieron los oscuros fines de la presidenta municipal, ya que busca beneficiar a sus familiares y amigos con los lotes, ya que varios de ellos están inscritos en el ejido, entre ellos el mismo secretario general del Ayuntamiento, Miguel Ángel Zetina Cuevas, así como Lucio González (primo del exgobernador Félix González Canto), Gerardo Yauffmann Barroso quien es asesor de Laura Fernández y los hermanos Alejandro y Rubén Montoya Mex, el primero de ellos es el sub delegado municipal.
Braulio Núñez López, quien es considerado por los comuneros como un traidor al servicio de Laura Fernández Piña, le sigue entregado las tierras a cambio de pequeños cargos dentro de la administración pública del ayuntamiento y por eso ya no están dispuestos a ceder pues el año pasado no obtuvieron ningún tipo de beneficio por los 10 lotes que le entregaron a la alcaldesa y en donde no se ha visto ningún tipo de obra.
10 hectáreas de terrenos fueron “donadas” hace un año para la construcción de plantas de aguas residuales, sin embargo, son los mismos pobla
CORRUPCIÓN
Laura Fernández quien ha sido señalada por diversos actos de corrupción y de solapar al director de la Policía Preventiva y Turística de Puerto Morelos, Alfredo Serrano Guinto, sobre el que pesa una denuncia por homicidio en grado de tentativa, extorsiones y abuso de poder, se ha ganado a pulso el repudio de los portomorelenses.
Otro lado oscuro de Fernández Piña es el turbio negocio que está haciendo con la obra pública, pues de acuerdo a un documento de la Dirección de Obras Públicas de Puerto Morelos, este año utilizaron un presupuesto de un millón 181 mil 231 pesos en el programa de Piso Firme, pero en el mismo revela que este municipio paga el metro cuadrado de piso de cemento más caro de los municipios de todo el estado de Quintana Roo.
La administración de Fernández Piña pagó mil 594 pesos por cada metro cuadrado de piso de cementos, mientras que otros municipios con mayor inversión en este rubro, están pagando 122 pesos por metro cuadrado para el programa Piso Firme que busca sustituir los pisos de tierra de la población.
El mismo documento de Obras 2020 revela que la cantidad de un millón 181 mil 231 pesos se invirtió únicamente en cubrir 741 metros cuadrados, pero si se toma en cuenta que cada vivienda considerada para este programa mide 24 metros cuadrados, entonces solamente 30 casas fueron beneficiadas con este costoso programa.
Sin embargo, existe la duda si realmente esa cantidad millonaria se utilizó para obra social o para guardarlo en su bolsa porque el municipio no transparentó el padrón de beneficiarios y tampoco en el portal oficial aparecen costos de otras obras que supuesta presume haber realizado.