Cozumel.- El reporte de una persona originaria de Monterrey supuestamente secuestrada, dejó al descubierto que células del crimen organizado podrían estar promoviendo el “turismo de adicciones”.
Toda vez que presuntamente la persona llegó a la isla a trabajar aunque no pudo indicar dónde, y estuvo una semana encerrado en una casa donde acumuló una deuda de 20 mil pesos en cocaína; razón por la cual ya no lo dejaron salir, hasta que sus familiares le depositaron el dinero.
La persona no quiso dar datos de cómo contactó a dichas personas, ni la ubicación de la casa donde estuvo consumiendo enervantes.
De acuerdo a la información proporcionada por el comandante de la policía ministerial en Cozumel, Néstor Segundo Pérez, indicó que minutos antes del mediodía del viernes, tuvo comunicación con el comandante antisecuestros de la vicefiscalía en la zona norte de Quintana Roo, Alberto Contreras, quien le indicó que habían tenido comunicación y solicitado la colaboración de la fiscalía antisecuestros del estado de Nuevo León, a través de su comandante Bernardo Rodríguez, toda vez que se había presentado ante dicha instancia Bernardo P.C, quien informó que su hijo Bernardo P.F llegó a Cozumel desde el 21 de julio y no sabían de él y aparentemente estaba secuestrado.
De acuerdo a lo denunciado en la Fiscalía de Nuevo León, se menciona que el joven de 25 años, ingeniero en sistemas, llegó a la isla de Cozumel el pasado sábado 21 de julio, supuestamente por cuestiones de trabajo (aunque no proporcionaron información al respecto); siendo que al día siguiente se comunicó vía telefónica con sus familiares para dar a conocer que se encontraba bien y se hospedó en una pensión. Pero a partir de ese día ya no hubo más comunicación, por lo que sus padres no lo podían contactar debido a que su celular marcaba apagado.
Fue hasta el pasado viernes, cuando el joven Bernardo se comunicó con su tío en Monterrey, de nombre Vidal F. al cual le pidió ayuda diciéndole que estaba metido en un problema muy grande, y que no podía hablar porque lo vigilaban, pero necesitaba $10 mil pesos y que se los depositara a la cuenta 5256782754852096, en un Oxxo; por lo que intentaron comunicarse en varias ocasiones pero el teléfono estaba apagado.
Tras activarse el código rojo y el operativo de búsqueda y localización en Cozumel, ubicaron la última llamada teléfono, que fue en el Muelle Fiscal, por lo que las unidades de la policía ministerial recorrieron y fue en la carretera costera de la avenida Rafael E. Melgar con Claudio Canto, donde se ubicó caminando a una persona con las características reportadas; por lo que al identificarse confirmaron que se trataba del Bernardo P.F, quien se encontraba sin lesiones visibles y arrastraba su maleta de viaje con sus pertenencias.
El joven les refirió a las autoridades que “lo habían mantenido encerrado en un domicilio donde estuvo drogándose desde el día sábado y no lo dejaban salir, ya que tenía una deuda de 20 mil pesos en cocaína y que la tenía que pagar para que lo dejaran salir”.
Pero se negó a proporcionar la ubicación y cómo fue que se contactó con estas personas; sólo pidió que lo llevaran al muelle para que pudiera regresar a Monterrey, por lo que se le escoltó para viajar a Playa del Carmen.
Alberto Tejero
Grupo Cantón
