CHETUMAL.- Con las nuevas tecnologías y el fácil acceso a las redes sociales, el Internet se ha convertido un peligro para niños y jóvenes del estado, debido a que son un blanco fácil para secuestradores, tratantes de blancas, abusadores y violadores sexuales.
Las redes sociales forman parte de la vida cotidiana de los jóvenes, son una herramienta potente y un peligro que hay que controlar, sobre todo en jóvenes menores de edad. Por ello hay que enseñarles a usarlo con prudencia y dejar que se registren con una edad adecuada.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en Quintana Roo se tiene registrado a más de 280 mil niños entre 6 y 17 años de edad que ya son usuarios de Internet y que están expuestos a cualquier peligro como el “sexting”, “grooming” o el “ciberbullying”.
La mayoría de los alumnos en esta era digital tienen dispositivo móvil, que les roba horas de sueño y ocasiona bajo aprovechamiento escolar; se podría decir que sólo duermen seis horas al día por estar en sus redes sociales. Estas tecnologías son adictivas y provocan problemas de concentración, de comportamiento, autocontrol y fracaso escolar.
El presidente de la Asociación Estatal de Padres de Familia, Héctor Santín Gómez, dijo que al no restringirles el uso de Internet a los menores, los vuelve vulnerables ante cualquier delito que diariamente acecha en las redes cibernéticas. Hemos recibido quejas en escuelas a causa del uso del celular, al usar una red social para ver páginas o fotos y videos inadecuados a su edad, destacó.
Las redes sociales, entre los jóvenes, se han vuelto incluso esenciales para la vida adolescente; están promoviendo la ansiedad y disminuyendo la autoestima. Por lo tanto, a los padres de familia les preocupa que las redes sociales y los mensajes de texto se han vuelto más intensos e íntimos.
Por Samuel Caamal/Grupo Cantón