CHETUMAL, Quintana Roo.- El “dragón de mil cabezas” que se tejió en pasadas administraciones para apoderarse de terrenos privilegiados en diversos municipios del estado, laceró el patrimonio de decenas de quintanarroenses.
Ejemplo de esto es el chetumaleño Juan Manuel Rodríguez Cheluja, quien además de haber sido despojado de 20 hectáreas de su patrimonio por parte de prestanombres de Gabriel Mendicuti Loría, también fue robado por gente allegada a Joaquín Hendricks Díaz, como son los Hamui en persona de Gerardo Miranda.
De acuerdo a la averiguación previa 7799/12-2015, que se interpuso en el Ministerio Público de Puerto Morelos, el señalado quien también es representante legal de la empresa Inmobiliarias Puerto Morelos S.A de C.V, que sin más ni más entró al predio ubicado en el kilómetro 325 de la carretera Chetumal-Cancún, lote 01, manzana 19, región 29 de ese destino turístico.
El predio original propiedad de Rodríguez Cheluja abarca 38 hectáreas, 20 que fueron despojadas por Carlos Hernández Orozco y Gerardo Ramayo Marrufo de la constructora Carade y 18 le fueron arrebatadas por los Hamui, en complicidad con el ex gobernador Roberto Borge Angulo.
LOS HECHOS
La averiguación previa destaca que el 16 de diciembre de 2015, Gerardo Miranda entró al predio y le gritó a las personas que estaban en ese sitio que se salieran por las buenas o los iba a sacar por las malas, porque el terreno era de su propiedad y que necesitaba que desalojaran por instrucciones del gobierno del estado.
Como el personal no hizo caso, los guardias de seguridad que acompañaban al empleado de los Hamui, de la empresa Safetimx, intentaron desalojar con lujo de violencia a los trabajadores y se armó una batalla campal que no pasó a mayores.
Ante esto, Rodríguez Cheluja pidió apoyo a Seguridad Pública municipal que llegó de inmediato y logró retirar a Gerardo Miranda y a los guardias de seguridad que había contratado.
Sin embargo, al día siguiente ya habían ocupado el predio y no los dejaron sacar la maquinaria que todavía se encontraba, motivo por el cual se procedió a interponer una demanda por despojo, robo y lo que resulte, dado que no pudieron recuperar una planta de soldar de 350 amp, un motor perkins marca Lincoln para trabajo pesado, que tenía un valor aproximado en el mercado de 80 mil pesos.
Además, de un bote cucharón para excavadora JCB, con predio de 75 mil pesos; una Catarina para tractor D8, cuyo costo asciende a 100 mil pesos y diferentes tipos de herramientas para maquinaria con valor de 25 mil pesos. (Renán Moguel/Quintana Roo Hoy)
