CHETUMAL, Q. ROO.- Los cuestionamientos por la integración de profesionistas foráneos a su gabinete, los despidos de burócratas, la falta de fincamiento de responsabilidades al ex gobernador Roberto Borge Angulo y funcionarios de su administración, y la revocación de algunos temas de las llamadas reformas de impunidad es lo más destacable en el primer mes del gobierno de Carlos Joaquín González.
La alta expectativa levantada en campaña por las promesas y la presentación de planes y proyectos para la reactivación económica, no ha sido aterrizada, y por el contrario se han realizado anuncios sobre acciones de recaudación de impuestos que preocupan a los empresarios.
La mayoría de los funcionarios, con el argumento de continuar con las revisiones del procedimiento de entrega-recepción comienzan a incurrir en opacidad para trasparentar las acciones, como se había prometido luego de ganar la elección y antes del 25 de septiembre cuando inició la administración.
Los roces que su personal ha tenido con representantes de los medios de comunicación, también son un tema que sobresale en este primer mes de Carlos Joaquín al frente del gobierno de Quintana Roo.
Desde los primeros días de septiembre, Carlos Joaquín desplegó la operación política necesaria, para que el día 3 de ese mes, se robara el voto del diputado Javier Padilla Balam, y se quedó con la mayoría y el control, del poder legislativo.
Con ello durante el mes de septiembre se lograron revocar las reformas al código civil para endurecer de nueva cuenta las penas y multas contra delitos de peculado por afectación el dinero y patrimonio del estado.
También se logró derogar reformas constitucionales, para regresar la facultad de proponer y designar a magistrados del Tribunal Superior de Justicia, junto a sus aliados los diputados del bloque mayoritario del PAN y el PRD desde el Congreso local.
Estas reformas, arrebataron el poder de decisión que se tenían concentrado en el magistrado presidente Fidel Villanueva Rivero, quien sumió al poder judicial en una crisis, al ofrecer su renuncia, luego de que desde el legislativo también se le pidió investigar por ilegalidades al frente de esa instancia.
La presentación y aprobación de parte del Congreso respecto del llamado paquete legal de disciplina financiera, que pretende cerrar el paso a la corrupción y sanear las finanzas fue otro tema que puede considerarse una promesa cumplida de parte de Carlos Joaquín.
En lo social, algunos ayuntamientos, como Cozumel, Solidaridad y Othón P. Blanco, han agradecido el apoyo que el gobierno del estado, les ha brindado sobre todo en materia de recolección de basura, otorgando camiones, y de bacheo, con la liberación de recursos para rehabilitar vialidades.
En contraparte, se destaca que desde el inicio de su administración, se ha criticado la renuncia obligada de cerca de 300 burócratas, que denunciaron también malos tratos, y que ya han iniciado en cien casos, procedimientos jurisdiccionales de ámbito laboral, para ser indemnizados “conforme a derecho”.
La llegada de un grupo de funcionarios desde el estado de Puebla, encabezados por el secretario de finanzas y planeación Juan Vergara Fernández, es uno de los puntos más álgidos que ha tenido que enfrentar el gobernador en turno.
Incluso la diputada federal, mantuvo un desencuentro con Carlos Joaquín, al considerar que se está haciendo “tragar camote, y desojar margaritas a los quintanarroenses que apoyaron al ahora gobernador durante su campaña, en clara alusión a no favorecer a la gente local con cargos importantes”. (Julián Puente / QUINTANA ROO HOY)
