PALOMA WONG
GRUPO CANTÓN
CHETUMAL.- Por realizar un texto sobre las afectaciones del Tren Maya a los vestigios arqueológicos de la zona sur de Quintana Roo, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) busca sin justificación destituir al arqueólogo Fernando Cortes de Brasdefer; derivado de ello sus compañeros realizaron ayer una manifestación en apoyo para evitar dicho cese.
Desde hace un mes, el arqueólogo investigador realizó un texto con fotografías en el que demuestra la afectación de los vestigios arqueológicos ubicados en el tramo 7 del Tren Maya específicamente los que se encuentran en la ruta que va de Chetumal a Escarcéga.
En esta zona precisó que existe una destrucción de miles de vestigios arqueológicos, entre edificios, piezas, cerámica y otros objetos; esta afectación la compartió con otros arqueólogos investigadores y estos a su vez lo hicieron público e incluso con las pruebas correspondientes. En represalia, el INAH determinó prescindir de los servicios de Fernando Cortés de Brasdefer, de manera unilateral, acusó el investigador Jaime Garduño Argueta. Como no hay razón para su cese, desde las oficinas centrales se inició una serie de actos de hostigamiento y otras acciones para que Cortés de Brasdefer se desista de lo hoy publicado, e incluso se condicionó al secretario general del SNIPCD-INAH, Alberto Herrera, se disculpara y adujera Cortes Brasdeffer mintió respecto a la destrucción del patrimonio arqueológico destruido en el tramo kilómetro 19 Escárcega, en trabajos del Tren Maya, pero ello no puede ser.