CANCÚN, Q.Roo.- A seis días que se restringió el horario de cierre de los bares de la ciudad hasta las 3 de la madrugada, el balance arrojó la detención de varios “narcomenudistas” al interior de estos lugares y la clausura de nueve establecimientos que no respetaron el acuerdo, a los cuales se les aplicará una multa de 16 mil pesos por cada uno, y en caso de reincidir, se les quitará su licencia de funcionamiento, así como de uso de suelo.
Desde que comenzó a aplicarse esta medida el pasado 26 de abril a la fecha, los negocios de giro negro han tenido una reducción de hasta el 30% en sus ventas diarias, lo que significa un promedio de entre cinco y 10 mil pesos.
Aunque es por cuestiones de seguridad, algunos clientes han manifestado su enojo y se han negado a salir de los bares, por lo que se ha tenido que utilizar la fuerza pública para retirarlos.
Ejemplo de esto fue el caso de un grupo de jóvenes que, luego de ser retirados a las 3 de la madrugada de un bar que se encuentra sobre la avenida Cobá, entre Palenque y La Costa, se encararon con los uniformados, aunque las cosas no pasaron a mayores. Esta versión la confirmó Miguel Hernández, vocero de Seguridad Pública.
Refirió que Seguridad Pública brinda apoyo a los inspectores de Fiscalización y de otras dependencias para pedirles a los propietarios de estos negocios su cierre a la hora acordada, aunado a que también ha permitido asegurar a varias personas con posesión de droga, lo que inhibe el consumo y la venta.
VIGILANCIA CONTINUA
Eduardo Mariscal de la Selva, director de Fiscalización, comentó que esta medida ya brindó resultados, porque han encontrado participación en los propietarios de bares del municipio, quienes respondieron en forma favorable a la petición de varias cámaras empresariales.
Explicó que las clausuras han sido mínimas en la zona centro, dado que en la zona hotelera no se toca la hora extraordinaria y los antros pueden cerrar hasta las 5 o 6 de la mañana.
Ahondó que son pocos los bares afectados en este tema, ya que únicamente algunos que se encuentran sobre la avenida Yaxchilán han dado a conocer que se les lesiona su economía.
Las autoridades municipales tienen un padrón de 780 bares que serán inspeccionados en forma cotidiana, y el que no respete el nuevo horario de cierre será sancionado con 200 salarios mínimos.
Carlos Pontón, propietario de un bar en la avenida Chac Mool, comentó que el horario de cierre les perjudicó en gran medida, ya que las ventas bajaron en forma considerable.
Además, las horas extras que pagaban les permitían compensar un poco los gastos del negocio, dado que después de las 11 de la noche la afluencia a estos sitios baja considerablemente.
MEDIDA DUDOSA
Juan Pablo Aguirre de la Torre, presidente de la Canirac, dejó en claro que el cierre hasta las 3 de la madrugada no les afecta, ya que el 98% de sus 115 afiliados cierra antes de esa hora.
Sin embargo, dijo que esta acción no detendrá la violencia, sino que prevendrá la posible tensión entre dos personas que podrían atentar contra la seguridad de la ciudadanía. (Renán Moguel/QUINTANA ROO HOY)