Cancún.- Al confirmar el secuestro de 30 empleados de las oficinas de un Call Center, el fiscal general del estado, Oscar Montes de Oca, afirmó que llegarán hasta las últimas consecuencias para esclarecer los hechos registrados la noche del pasado martes.
Afortunadamente, las personas fueron rescatadas la mañana del miércoles en el fraccionamiento gran Santa Fe II, en la Supermanzana 325, bajo un operativo que arrojó la detención de cinco personas involucradas en el secuestro.
Confirmó que este hecho fue un claro secuestro, porque las personas fueron encerradas en dos habitaciones con los ojos vendados y privados de su libertad con la finalidad de hacerles daño.
Aseguró que esta situación deriva de una disputa entre los socios del negocio que operaba en una casa particular, habilitada como oficina.
Explicó que en un principio eran 30 las personas que fueron “levantadas”, pero que tres fueron dejadas en libertad el mismo martes.
Añadió que las investigaciones continuarán y hasta el momento también han sido asegurados dos inmuebles.
De las personas que fueron detenidas, cuatro son mexicanos y uno de nacionalidad extranjera, quienes podrían estar relacionados con otros delitos registrados en la entidad.
Sin embargo, reiteró que la línea de investigación más fuerte que se sigue es la disputa entre los socios de la empresa, al tratarse de una probable venganza de uno de ellos hacia los empleados y hacia el otro socio.
Secuestradores tenían armas de grueso calibre
Durante el operativo para rescatar a las personas que habían sido “levantadas” en Santa Fe, fueron aseguradas armas largas tipo AR-15, dos pistolas calibre 9 milímetros, cartuchos, cargadores, entre otros artículos que utiliza la delincuencia organizada.
Tres responsables fueron capturados en el interior de la vivienda donde tenían a las víctimas, mientras que otros dos intentaron darse a la fuga por las azoteas de las casas aledañas, pero fueron detenidos.
Los agraviados relataron que mientras laboraban, llegaron ocho sujetos con armas de fuego, los sacaron de las oficinas y se los llevaron al domicilio donde fueron ubicados. En la Fiscalía General del Estado se reencontraron con sus familiares para hacer su declaración correspondiente, luego de que ya se había presentado una denuncia por su desaparición.
Por Saraí Reyes/Grupo Cantón
