Jesús Vázquez
CANCÚN, Q. Roo

El primer gran proyecto privado de recuperación de playas está en marcha. No es un proyecto aislado de un solo hotel. Se trata del Programa de Rehabilitación y Protección de Ambientes Costeros Sistema Ambiental Regional Punta Bete-Punta Maroma, desarrollado por Grupo OHL para la recuperación del frente de playa del complejo Mayakoba, al que se han unido los complejos contiguos Tres Ríos y Kanai.

En conjunto, el proyecto pretende la recuperación de casi 7 kilómetros contiguos de playa en la Riviera Maya. Desde 2015, Agustín Sarasola, director general de Desarrollos OHL-Mayakoba, advirtió que en caso de que el gobierno federal no cumpliera su palabra de coordinar con recursos públicos el rescate de las playas de Cancún y la Riviera Maya, muchos hoteleros optarían por financiar con dinero privado las tan necesarias obras.

Jean Agarrista Marfín, dirigente de la Asociación de Hoteles de la Riviera Maya, confirmó que las directivas de los tres complejos hoteleros (Tres Ríos, Mayakoba y Kanai) acordaron arrancar un proyecto conjunto de playas, aprovechando que los tres desarrollos son contiguos y abarcan un ancho continuo de playa de casi 7 kilómetros.

El proyecto en el frente de playa de Mayakoba implicará una inversión de 30 millones de dólares, la creación de arrecifes artificiales y el vertido de miles de centímetros cúbicos de arena en un tramo de 1.5 kilómetros de playa.

Cuentan con la aprobación ambiental de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y ocupará una superficie total de 48.45 hectáreas (ha) de las cuales 11.35 ha (23%) se ubican en la zona litoral y marina frente al desarrollo hotelero. Las 37.10 ha (77%) restantes corresponden a los bancos de arena que el proyecto utilizará de forma temporal para extraer el material que se depositará en el frente de playa del complejo.

Según el estudio que realizó la cadena hotelera para someter el proyecto a evaluación ambiental ante Semarnat, entre los años 2000 y 2005 se registró una pérdida de 8.08 ha de duna por efecto de la erosión, lo que representó una pérdida de más del 75% de la superficie de este ecosistema en ese momento. Posterior al 2005 se ha observado un incremento en la superficie de duna de hasta 0.75 ha que representan apenas 8.20% de la superficie de playa que existía frente a Mayakoba en 2004.

“Al frente del predio que ocupa Mayakoba se ha registrado una pérdida promedio de al menos 30 metros de playa y duna entre los años 2004 y 2012 (hasta 47 metros en algunos sitios), a razón de 3.75 metros por año”, según se lee en el proyecto consultado por Quintana Roo Hoy.

Se alerta que en caso de no hacer nada por revertir el deterioro erosivo de la playa, ésta terminará al cabo de unos años de desaparecer por completo y extendiéndose a lo largo de la franja costera de la Riviera Maya.

Tres Ríos

En el mismo tramo Punta Bete-Punta Maroma, Grupo Sunset también tiene aprobado un proyecto de recuperación de playas, que se trabaja de manera conjunta con Mayakoba para conformar una sola franja de playa recuperada.

El proyecto de Tres Ríos abarcará 30 hectáreas y también pretende construir arrecifes artificiales, rellenar las dunas costeras con arena extraída de bancos submarinos y construir estructuras que eviten la erosión por el constante oleaje del mar.

Grupo Sunset argumenta que el Sistema Ambiental Punta-Punta Maroma, en cuyo interior se encuentra el megadesarrollo Hacienda Tres Ríos, “enfrenta un fuerte proceso de erosión y retroceso en la línea de costa que pone en riesgo los bienes y servicios ambientales derivados de dichos ecosistemas, así como el patrimonio de los inversionistas y el beneficio socio-económico que representan la construcción y operación de desarrollos turísticos en la región”.

La empresa ha documentado, entre los años 2004 y 2010, la pérdida de hasta 22 metros de ancho de playa (hasta 54 metros en algunos sitios) a razón de 3.67 metros al año, ante ello proponen la construcción de 4 arrecifes artificiales paralelos a la costa que ayuden a disipar la energía del oleaje en condiciones normales y de tormenta, y proteger el frente de costa del desarrollo Tres Ríos; la extracción y transporte de arena de bancos cuidadosamente seleccionados para rellenar la playa y reconstruir la duna; la construcción y forestación de una duna en la playa para amortiguar el oleaje incidente y mantener la arena en el sitio.

Gabriel Santoyo, director de Desarrollo Sustentable confirmó que el proyecto está en marcha, pues no podían esperar más el largamente anunciado programa de rehabilitación de playas que supuestamente se financiaría con recursos del gobierno federal en 16 destinos de todo el país.

Kanai

Por último, el Programa de Rehabilitación y Protección de Ambientes Costeros Sistema Ambiental Regional Punta Bete-Punta Maroma incluirá el desarrollo Kanai, el cual se encuentra en fase de construcción del primer hotel St. Regis. Respecto de este proyecto se conoce muy poco de sus detalles técnicos, salvo que implica la recuperación de 1.5 kilómetros de playa.

Proyecto malogrado

En 2014 se incluyó en el Plan Nacional de Infraestructura (PNI) del gobierno federal un ambicioso proyecto de recuperación de playas en 16 destinos del país, para los cuales se destinaría un presupuesto de 6,000 millones de pesos.

El documento oficial del Programa Nacional de Infraestructura establece que al menos 12 de los 20 principales destinos de sol y playa presentan erosión en las playas, entre los que se encuentran Los Cabos, Mazatlán, Puerto Vallarta, Manzanillo, Ixtapa, Acapulco, Veracruz, Boca del Río, Cancún, Riviera Maya, Isla Mujeres y Cozumel.

Además se tienen identificados problemas de erosión en Tecolutla, Progreso, Playa del Carmen y Holbox.

El documento expone lo siguiente: “El grado de erosión es variable pero en todos ellos creciente y con alto grado de vulnerabilidad sobre todo por los efectos del cambio climático. Este fenómeno genera afectaciones de diversa índole, tanto para el ser humano en sus actividades y patrimonio, como en el ecosistema costero del sitio. De ahí la necesidad de llevar a cabo las acciones que permitan tanto restituir las condiciones morfológicas de la playa, como aquellas que permitan su conservación. Se planea la realización de obras de contención, así como relleno de arena. El programa contempla la recuperación de las 15 playas con un monto de 6,000 millones de pesos.

Se planea la realización de obras de contención, así como relleno de arena”.

A dos años de la publicación del PNI, se han anunciado al menos dos grandes recortes presupuestales, así como la reestructuración del presupuesto federal desde cero, con el fin de eliminar programas y proyectos no prioritarios. Al no estar incluido el rescate de playas en el presupuesto federal, todo parece indicar que éstas no están identificadas como prioritarias dentro de las políticas federales del gobierno actual.