CANCÚN, Q.Roo.- La expresidenta municipal en Benito Juárez, Magali Achach de Ayuso, reconoce que se requiere un delegado especial en el PRI, porque Manuel Andrade Díaz “no escucha”; y para evitar el riesgo de que otros militantes también presenten sus renuncias, el dirigente nacional, Enrique Reza Ochoa debe voltear a ver a Quintana Roo.
Achach de Ayuso, coincidió con sus correligionarios en que se requiere un delegado especial, porque Andrade Díaz sólo está de vacaciones en Cancún y no escucha las peticiones que está haciendo la militancia para renovar la dirigencia.
En septiembre del año pasado durante la definición de la presidencia del Congreso del Estado, tuvo un enfrentamiento directo con Jorge Emilio Martínez, líder moral del Partido Verde, porque les advirtió a ella y a su hija, la diputada Candy Ayuso quien se enfermó y no acudió al Congreso, de que las expulsaría del PRI. Y en ese momento, ella señaló que parecía que quien mandaba era el “Niño Verde”.
A cinco meses de ese conflicto y de que a fines de enero pasado, alrededor de 250 priístas solicitaron la salida de Raymundo King de la Rosa además de quejarse de que el Partido Verde recibía los mejores espacios, Achach de Ayuso dijo coincidir con sus compañeros de partido en que el Verde tiene el control del tricolor.
También reconoció que los partidos deben competir en alianza porque un partido solo no puede ganar una elección y comparó las alianzas con una pareja, que una vez casada y con hijos, en lugar de que sean éstos de ambos, sólo pertenezcan al padre o a la madre.
“A mí me gustaría que el partido se renovara, que tuviéramos una alianza (con el Partido Verde y el Partido Nueva Alianza), pero una verdadera alianza, no una alianza en donde seamos empleados… darles posiciones a cada partido que participó, porque ahora hay qué pedirle permiso al Verde para hacer algo”, aseguró. (Virginia Próspero/Quintana Roo Hoy)
