Por sentimientos de culpa, padres de familias gastan grandes cantidades de dinero para compensar a sus hijos ante la poca atención que le dan durante el año, esta situación es tradicional en las festividades decembrinas, así lo refieren especialistas.
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Si algún padre de familia está pensando comprarle uno o varios regalos a sus hijos con precios elevados, lo recomendable es no hacerlo, de acuerdo con el especialista en ahorro, Humberto Vergara.
Destacó que durante Navidad, Fin de Año y Día de Reyes, los lamentos de algunos padres por no poder suplir todos los deseos de sus hijos, quienes piden y piden regalos motivados por la publicidad y la sociedad de consumo es muy común, y expresa que los mejores regalos que se les pueden dar a los hijos no son de orden material.
“No consumen inteligentemente, los padres de familia, la mayoría consume por culpa y dicen, yo no tuve los regalos en Navidad y mis padres no me lo pudieron dar, yo quiero que a mi hijo no le falte nada y es como un péndulo nos vamos totalmente a los extremos” afirmó.
Humberto Vergara refiere: “los niños no se pueden sobornar: los regalos nunca suplirán la falta de tiempo o atención con tu hijo”, y aconseja, además, no intentar deslumbrarlos “para que olvide tus fallos, los olvidará temporalmente, pero cuando pase la Navidad seguirá teniendo las mismas carencias”.
TECNOLOGÍA
También, indicó que con estos regalos caros o de tecnología como tabletas o teléfonos celulares, los padres pretenden que los niños se estén quietos y callados, lo cual no es una buena práctica, porque las tabletas vienen a sustituir la televisión como a la moderna niñera, al otorgarle un equipo de este tipo.
Además, dijo, que dan un mal ejemplo a sus hijos en el esquema de ahorro y de responsabilidad a la hora de comprar, pues los menores no conocen el valor del dinero ni el trabajo que cuesta conseguirlo.
Refirió que si los niños ven que sus papás traen un teléfono inteligente, que puede corresponder a seis meses de sueldo o que no haya para pagar ciertas cosas, un niño aprende a actuar de esa forma, por ello, recomienda comprar un solo regalo a un precio módico; más atención, cariño, plática y convivencia es el mejor regalo, así como una alcancía para que comiencen con el hábito de ahorrar.
Saraí Reyes
Quintana Roo Hoy
