CANCÚN, Q. Roo.- Cancún tuvo su lado triste en el año 2016. Un ambiente de violencia sin precedentes, con más ejecuciones en la vía pública, asesinatos, feminicidios, crímenes contra niños, asaltos, ataques a balazos y suicidios, rompió la tranquilidad del “paraíso”.
El estruendo de ráfagas de armas largas y disparos sembró el terror en distintos puntos de la ciudad y esto se volvió algo cotidiano, incluso en la zona hotelera, donde por primera vez se registró un ataque a balazos en el área de discotecas, con un saldo de un muerto y dos lesionados.
Nadie estuvo a salvo. La inseguridad y el temor de convertirse en víctima de la delincuencia prevaleció entre la ciudadanía, no solo por asaltos a transeúntes y agresiones, sino también porque hubo víctimas inocentes en varios casos, donde las balas hicieron blanco en niños y mujeres que nada tenían que ver con la sed de venganza de los grupos criminales.
De hecho, dos intentos de ejecución ocurrieron en medio de una multitud de personas, en un tianguis de la Región 219 y en una feria navideña en el cruce de las avenidas Kabah e Xcaret, junto al edificio de la Fiscalía General del Estado, donde el pánico se apoderó de cientos de personas que corrieron ante el riesgo de los disparos que fueron dirigidos contra dos empleados, quienes resultaron lesionados.
Este ambiente de terror fue ocasionado principalmente por los grupos del narcotráfico que buscan apoderarse del control de la venta de drogas y los cobros de derecho de piso, con la incursión del Cártel de Jalisco Nuevo Generación, el cual intenta desplazar a los grupos de los Pelones y el Cártel del Golfo.
Sin embargo, la delincuencia “común” también estuvo desatada en el 2016, principalmente con asaltos a mano armada en farmacias y tiendas de conveniencia.
Los índices delictivos se incrementaron de manera alarmante en el transcurso del 2016, principalmente por dos factores revelantes, la entrada en vigor del nuevo Sistema de Justicia Penal y la transición de gobierno.
Desde el 30 de abril pasado, las autoridades están “atadas de manos” por los requisitos más estrictos del nuevo Sistema de Justicia Penal para concretar detenciones y con esto disminuyó drásticamente la captura de delincuentes, mientras la transición de gobierno generó un vacío de poder, debido a que las autoridades salientes desatendieron sus actividades para preparar su retirada.
EJECUCIONES
En el 2016 ocurrieron 60 ejecuciones en Cancún, cifra que alcanzó la misma cantidad de muertes de este tipo, ocurridas en los dos años anteriores juntos, pues el 2015 registró 38 casos y el 2014 tuvo 22 decesos.
Además, por primera vez los grupos del narcotráfico dejaron partes de un cuerpo descuartizado en Puerto Morelos y una menor, de 17 años, fue ejecutada a balazos en su domicilio en el poblado de Leona Vicario.
Sin embargo, el incremento de las ejecuciones tuvo una peligrosa característica, por la forma en la que fueron cometidas, con más casos de disparos en la vía pública y ataques con ráfagas de armas largas contra domicilios y casas de masaje.
ASESINATOS
Los casos de mujeres asesinadas causaron alarma, preocupación y miedo en Cancún en el 2016, con un total de 10 casos que dejaron a familias sin madres, esposas, hermanas e hijas.
Los asesinatos fueron perpetrados principalmente por las parejas sentimentales de las ahora occisas, en arrebatos de celos y con esto, sus historias de amor terminaron abruptamente en la muerte. Sin embargo, también hubo casos cometidos por depredadores sexuales que atacaron a sus víctimas en áreas de vegetación.
En uno de los casos más dramáticos, una niña, de apenas siete años fue violada y asesinada en su propio hogar, en el fraccionamiento Puertas del Mar, el 13 de enero pasado y al día siguiente su padre fue detenido como el presunto responsable, quien cometió el crimen en una venganza contra su esposa por una supuesta infidelidad.
También, un niño, de tan solo cinco años, fue asesinado junto con su madre, en un domicilio del fraccionamiento Ciudad Natura. (Antonio Alcocer / QUINTANA ROO HOY)